Santiago de Compostela, 29 ene (.).- La entidad financiera Abanca ha registrado un beneficio neto de 430 millones de euros en 2018, lo que supone un crecimiento del 17,3 % con respecto a 2017, cuando había obtenido 367 millones.
Estos resultados, que han sido presentados en una rueda de prensa en Santiago de Compostela, se apoyan en el incremento de los ingresos recurrentes, con un crecimiento del 9,5 % del margen básico y un aumento del volumen de negocio hasta los 82.713 millones tras las adquisiciones de Banco Caixa Geral España y Deutsche Bank (DE:DBKGn) PCC Portugal.
El presidente de la entidad, Juan Carlos Escotet, ha destacado la “fortaleza comercial” de Abanca en tanto en el negocio bancario como en los seguros, así como el “robusto” nivel de capitalización, con un ratio CET1 del 14,8 %.
Tras haber cumplido sus objetivos estratégicos para el trienio 2014-2017, Abanca da inicio al período 2018-2020 excediendo las expectativas marcadas para el primer año de esta nueva etapa, con un volumen de negocio de 82.713 millones frente a los 69.000 previstos y una rentabilidad del 11,4 % frente al objetivo del 10 %.
El consejero delegado de la empresa, Francisco Botas, ha hecho hincapié en la relevancia de haber reducido la tasa de morosidad al 3,6 %, una cifra que se sitúa por debajo de la media del sistema, el 5,3 %, un dato que, precisamente, había registrado el ejercicio anterior.
Abanca también ha cerrado el ejercicio con una reducción de la tasa de activos improductivos, que se ha visto reducida en un 29 % hasta alcanzar el 1,6 % del total de activos; esta cifra, unida a la tasa de cobertura de estos activos, que asciende al 58,5 %, sitúa a la entidad como la de mejor ratio Texas del sistema, con un 36,2 %.
De este modo, la entidad se confirma, según ha asegurado su presidente, como “una de las más rentables del sector financiero español”, después de haber mantenido por quinto año consecutivo una rentabilidad cercana o superior al 10 %; en el caso del pasado ejercicio, ésta fue del 11,4 %.
“Abanca ha registrado en 2018 el mejor ejercicio de su trayectoria en términos económicos”, ha celebrado Escotet, quien ha reiterado que la rentabilidad ROTE (el rendimiento del patrimonio tangible) se situó en un 11,4 %, una circunstancia que ha achacado a la ya citada “fortaleza comercial”.
En este sentido, la entidad ha cerrado el ejercicio con un volumen de negocio de 69.213 millones sin contar las operaciones corporativas, lo que supuso un crecimiento del 5,6 %, un incremento propiciado por un aumento del 12 % en el número de nóminas domiciliadas y del 13 % en la captación de nuevos clientes de seguros.
Por su parte, Botas ha incidido en la liquidez de la entidad, que mantiene “una estructura de financiación muy sana” basada en depósitos minoristas y ha precisado que el ratio de depósitos de Abanca se mantiene en el 92 % frente al 104 % al que asciende la media del sector.
Con respecto a las operaciones corporativas, el 2018 ha estado marcado por la adquisición de Deutsche Bank PCC Portugal el 27 de marzo, lo que ha permitido a la entidad sumar 41 oficinas en el país luso; y la compra de Banco Caixa Geral España el 22 de noviembre, que permitirá a Abanca contar con 110 nuevas oficinas y reforzar su red estatal.
“Nos ilusiona especialmente que esta operación nos permite mejorar considerablemente en Madrid y en Extremadura, donde podremos apuntalar el desarrollo del sector agrícola, que empieza a tener una cierta importancia en nuestra cuenta de resultados”, ha señalado Escotet.
En este sentido, el presidente ha señalado que la adquisición de las oficinas Caixa Geral en España permite “complementar” la oferta de Abanca, mientras que tan solo ha generado solapamientos en Galicia, donde se buscará de “optimizar de la mejor forma posible”, si bien ha descartado “medidas traumáticas” para ajustarse a este nuevo escenario.
1011838