Por Stephen Brown y Alexandra Hudson
BERLÍN (Reuters) - Manuel Valls utilizó su primera visita a Berlín como primer ministro francés para tratar de convencer a Alemania de que su gobierno se toma en serio hacer la economía más competitiva, declarando que Francia "no es el niño enfermo de Europa".
La canciller Angela Merkel alabó las reformas que Valls esbozó pero dijo que dependía de la Comisión Europea juzgar si París debería tener más tiempo para reducir su déficit público dentro de los límites de los tratados de la UE.
Responsables de la UE y del Banco Central Europeo (BCE) están presionando a Francia para acelerar las reformas y la consolidación presupuestaria y Alemania incrementará la inversión pública dentro de una estrategia para revivir la estancada economía.
Pero el presidente francés, François Hollande, profundamente impopular, descartó la semana pasada eliminar la semana laboral de 35 horas, subir las pensiones o recortar el salario mínimo, mientras a que el ministro de Finanzas de Berlín rechazó la presión para gastar más en infraestructuras.
Tras un almuerzo de trabajo con la canciller, Valls dijo que Francia hallaría un modo de emular el progreso de Alemania del "hombre enfermo de Europa" que era hace una década al motor del crecimiento de la zona euro, siempre que Berlín apoye el llamamiento francés de impulsar la demanda.
"Entiendo las dudas y las preguntas del pueblo alemán, sus representantes y a veces la prensa - muchos de los cuales dicen, esencialmente: "Hemos sufrido reformas y los franceses no son capaces de hacerlas. Y si no lo hacen no es bueno para Alemania" dijo en rueda de prensa.
"A los alemanes les gustan los franceses cuando mantienen sus promesas. Y a los franceses les gustan los alemanes cuando tratan de comprenderlos", dijo.
La canciller alemana alabó los esfuerzos alemanes por restaurar la falta de competitividad y reducir el gasto, pero dijo que dependía de Bruselas evaluarlo.
"Manuel Valls acaba de presentar su agenda de reformas, y creo que lo que Francia está llevando a cabo son una serie de medidas impresionantes", dijo. "Veo estos grandes esfuerzos, y la valoración dependerá de la Comisión Europea".