Bruselas, 26 ene (EFE).- Un abogado general del Tribunal de
Justicia de la UE ha concluido hoy que la responsabilidad de los
transportistas aéreos en casos de pérdida de equipaje está limitada
a un importe máximo de unos 1.100 euros, cantidad que comprende
tanto los daños y perjuicios materiales como los morales.
El abogado general, cuya función es proponer a los jueces
europeos una solución antes de que estos dicten sentencia, se ha
pronunciado a propósito de una reclamación que planteó un ciudadano
que facturó su maleta en Barcelona, en un vuelo de la compañía
Clickair, y a quien no se le entregó el equipaje a su llegada a
Oporto.
El pasajero reclamaba una indemnización de 3.200 euros, de los
cuales 2.700 euros correspondían al valor del equipaje y 500 euros a
los "daños morales" causados por dicha pérdida, pero la compañía
aérea discutía la cuantía por estimar que superaba el límite de
responsabilidad por extravío de equipaje.
El Juzgado Mercantil 4 de Barcelona, que tramita el litigio,
planteó una cuestión prejudicial al Tribunal de Justicia de la UE en
la que pidió que aclarara si el límite de responsabilidad al que se
refiere el Convenio de Montreal comprende tanto los daños y
perjuicios materiales como los morales derivados de la pérdida del
equipaje.
En sus conclusiones, el abogado general ha recordado hoy que
efectivamente la responsabilidad de las compañías aéreas respecto al
transporte de pasajeros y equipaje se regula a través de las
disposiciones del Convenio de Montreal de 1999, que entró en vigor
en la UE en junio de 2004.
El Convenio prevé que el transportista es responsable del daño
causado mientras el perjuicio se haya producido a bordo de la
aeronave o bajo la custodia del transportista, aunque su
responsabilidad está limitada a 1.100 euros aproximadamente.
El abogado general ha propuesto a los jueces europeos que
respondan en su sentencia a la cuestión planteada diciendo que la
responsabilidad del transportista en caso de pérdida del equipaje se
limita a ese importe fijado en el Convenio, que prevé la aplicación
del mismo límite en caso de destrucción, avería o retraso. EFE