FRÁNCFORT (Reuters) - El préstamo a empresas en la zona euro creció el mes pasado a su mayor ritmo en casi cinco años y medio, aunque el crecimiento del dinero en circulación se ralentizó, mostraron el lunes datos del Banco Central Europeo (BCE), lo que envía un mensaje mixto para el banco central, que está revisando su política de estímulos.
Los responsables del BCE se reunirán el próximo 8 de diciembre para decidir si extienden el programa de compra de bonos por valor de 1,74 billones de euros más allá de marzo de 2017 ante la recuperación de la inflación, si bien las perspectivas siguen trufadas de riesgo político y los mercados están nerviosos.
Los préstamos bancarios a empresas de la zona euro crecieron un 2,1 por ciento en octubre, acelerándose ligeramente respecto al mes anterior y marcando el ritmo más rápido desde junio de 2011.
Es probable que el BCE tome esto como una prueba de que su objetivo de estimular los préstamos a la economía real está funcionando.
Pero la tasa de crecimiento anual de la medida del dinero en circulación en los 14 países que compertan la divisa, conocida como M3, que en el pasado ha servido para predecir la actividad económica, se ralentizó hasta el 4,4 por ciento, su nivel más bajo desde marzo de 2015, desde la cifra de 5,5 por ciento registrada en septiembre.
Esta ralentización estuvo provocada por una caída en los activos exteriores netos, es decir, divisas, títulos y préstamos extranjeros más el oro que tenían los bancos y los mercados de dinero de la eurozona, restándole sus pasivos a corto plazo con las entidades extranjeras.
Los activos exteriores netos se han ido reduciendo de manera constante desde que el BCE puso en marcha su programa de compra de bonos a principios de 2015.