Río de Janeiro, 27 sep (EFE).- El Banco Central brasileño redujo desde el 2,5 % que había calculado en junio hasta el 1,6 % su previsión de crecimiento de la economía de Brasil este año, mientras que elevó del 4,7 % al 5,2 % su proyección para la inflación.
Las nuevas previsiones constan del Informe Trimestral de la Inflación divulgado hoy por el organismo emisor y confirman la tendencia de desaceleración de la economía brasileña como consecuencia principalmente de la crisis global.
Esta es la segunda vez consecutiva este año que el Banco Central revisó a la baja su previsión para el crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2012, ya que en el informe trimestral divulgado en abril proyectaba una expansión económica del 3,5 %.
La nueva proyección del emisor para el crecimiento este año se situó por debajo incluso de la divulgada recientemente por el Ministerio de Hacienda (2 %) y muy próxima a la de los economistas de las instituciones financieras consultados la semana pasada por el Banco Central (1,57 %).
De confirmarse la previsión del organismo responsable por la política monetaria, Brasil registrará este año su menor crecimiento desde 2009, cuando, como consecuencia de la crisis económica internacional de entonces, el PIB se retrajo un 0,6 %.
La nueva proyección también confirma la tendencia a la desaceleración de Brasil que, tras crecer un 7,5 % en 2010, sólo se expandió un 2,7 % el año pasado.
Pese a las numerosas medidas de estímulo anunciadas en los últimos meses, Brasil sólo creció un 0,6 % en el primer semestre del año, frente a la expansión del 3,8 % registrada en el mismo periodo de 2011.
Tanto el Gobierno como los economistas del mercado, sin embargo, prevén una recuperación a partir del tercer trimestre y un crecimiento más fuerte en los últimos tres meses de este año.
El propio Banco Central, en el estudio divulgado este jueves, prevé que el crecimiento en los doce meses entre julio de 2012 y junio de 2013 se situará en el 3,3 %.
"La recuperación de la actividad económica nacional se viene materializando de forma gradual, pero el ritmo de actividad sólo será más intenso en el segundo semestre de 2012 y en el próximo año", según el informe del emisor.
"La demanda interna será impactada (positivamente) en los próximos meses por las políticas recientemente implantadas", agrega el estudio al referirse a las medidas adoptadas por el Gobierno para reducir los impuestos sobre los sectores más afectados por la crisis; disminuir los costo de producción y los costos laborales, y estimular el consumo mediante el recorte de los tipos.
En cuanto a la inflación, la previsión del Banco Central es que se sitúe en el 5,2 % este año pero que baje al 4,9 % en 2013.
En ambos casos la inflación estaría dentro de la meta del Gobierno, que espera cerrar este año y el próximo con una variación en el índice de precios del 4,5 %, aunque con un margen de tolerancia de dos puntos porcentuales, lo que permite que la tasa llegue hasta el 6 %.
Según las proyecciones, la inflación de este año y del próximo, sin embargo, será inferior a la del 2011, cuando la tasa fue del 6,5 %. EFE