México, 10 feb (EFE).- El banco español Santander eliminó cerca
de un millón de tarjetas de crédito en México en 2009, lo que le
permitió reducir la cartera por ese tipo de plásticos en el país,
afirmó hoy el presidente de la filial mexicana, Marcos Martínez.
En un encuentro con periodistas, el ejecutivo señaló que el banco
contaba en 2008 con alrededor de cuatro millones de usuarios de
tarjetas de crédito, pero cerró el año pasado por debajo de los tres
millones, cifra que en 2010 se mantendrá casi igual.
Sin embargo, el año pasado la institución financiera colocó
190.000 tarjetas de crédito nuevas entre sus clientes y en 2010
espera aumentar el número a 300.000.
Martínez destacó que, como resultado de las medidas tomadas por
el Santander para reducir el endeudamiento de su clientes y limitar
el riesgo, la cartera total por tarjetas de crédito cayó de unos
53.000 millones de pesos a 29.696 millones (de 4.076 a 2.284
millones de dólares).
Eso supuso una contracción del 43 por ciento, superior a la del
conjunto del mercado, que cayó alrededor del 20 por ciento.
"Durante 2009 el entorno económico del país afectó de manera
severa al mercado de tarjetas de crédito. Por tanto, Santander ha
enfocado sus esfuerzos a cuidar la calidad de esta cartera y a
vincular a los clientes", sostuvo.
Estas medidas de saneamiento financiero han afectado
positivamente los resultados del banco, ya que el índice de cartera
vencida total de la compañía disminuyó de 3,1 por ciento en 2008 a
1,7 por ciento en 2009.
Según Martínez, también influyó el hecho de que el banco, que
este año no abrirá ninguna sucursal nueva, apoye a sus clientes que
se enfrentan con problemas de pago, ofreciéndoles la posibilidad de
reestructurar sus deudas.
El directivo se mostró confiado en que 2010 "será un muy buen
año" para el banco español en México, que en 2009 aumentó su
beneficio neto en 38,7 por ciento, hasta los 11.825 millones de
pesos (909,6 millones de dólares).
En este sentido, dijo que prevé que la cartera total del banco
crezca hasta un 19 por ciento en 2010, el crédito al consumo entre
15 y 20 por ciento, y el corporativo un 20 por ciento, mientras que
el de pymes se mantendrá igual.
También estimó que Santander mantendrá este año una participación
del 22 por ciento en el mercado de créditos hipotecarios, y que
reducirá voluntariamente su cuota en el segmento de infraestructura
de un 75 por ciento a menos del 50 por ciento, para evitar una
"saturación de crédito" en ese sector y una mayor exposición al
riesgo. EFE