Por Ann Saphir y Howard Schneider
11 ago (Reuters) - La ralentización de la inflación en Estados Unidos puede haber abierto la puerta a la Reserva Federal para moderar el ritmo de las próximas subidas de los tipos de interés, pero los responsables del banco central no dejaron ninguna duda que seguirán endureciendo la política monetaria hasta que las presiones sobre los precios se terminen por completo.
Un informe del Departamento de Trabajo de EEUU que mostró que los precios al consumidor no subieron en absoluto en julio en comparación con junio fue sólo un paso en lo que los dirigentes monetarios dijeron que sería un proceso largo, ya que con la escasez de mano de obra disponible y las subidas en las bolsas sugieren que la economía necesita más del enfriamiento que vendría de unos costos de endeudamiento más altos.
La Reserva Federal está "muy, muy lejos de declarar la victoria" sobre la inflación, dijo el presidente del Banco de la Reserva Federal de Mineápolis, Neel Kashkari, en la Conferencia de Ideas de Aspen, pese a las "bienvenidas" noticias del informe del IPC.
Kashkari dijo que no ha "visto nada que cambie" la necesidad de elevar la tasa de política de la Fed al 3,9% a finales de año y al 4,4% a finales de 2023.
En la actualidad, el tipo de interés se sitúa entre el 2,25% y el 2,5%.
Sin duda, Kashkari es el miembro más beligerante de la Fed. La mayoría de sus 18 colegas creen que un poco menos de endurecimiento de la política monetaria puede ser suficiente para controlar mejor los precios.
La presidenta de la Fed de San Francisco, Mary Daly, en una entrevista con el Financial Times, también advirtió que es demasiado pronto para que el banco central estadounidense "declare la victoria" en su lucha contra la inflación.
Sin embargo, Daly dijo que una subida de tipos de medio punto porcentual era su "línea de partida", pero no descartó una tercera subida consecutiva de los tipos del 0,75% en la próxima reunión de política del banco central en septiembre, según el artículo.
Calificando la inflación de "inaceptablemente" alta, el presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans, dijo que cree que la Fed probablemente tendrá que elevar su tasa de política al 3,25%-3,5% este año y al 3,75%-4% a finales del próximo año, en línea con lo que el presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló tras la última reunión de la Fed en julio.
Aun así, dijo, el informe del IPC marca la primera lectura "positiva" de la inflación desde que la Fed comenzó a subir los tipos de interés en marzo en incrementos crecientes: un cuarto de punto porcentual para empezar, luego medio punto y luego tres cuartos de punto porcentual tanto en junio como en julio.
Tras el informe del IPC del miércoles, los operadores de futuros vinculados al tipo de interés de referencia de la Fed redujeron las apuestas a una tercera subida consecutiva de 75 puntos básicos en su reunión de política monetaria del 20-21 de septiembre y ahora ven un aumento de medio punto como la opción más probable.
Los mercados de renta variable siguieron una pauta similar ante la esperanza de un banco central menos agresivo y el S&P 500 subió un 2,1%.
Los mercados financieros prevén un tipo de interés máximo de los tipos de la Fed del 3,75% para finales de año, con recortes de los tipos el año que viene, presumiblemente a medida que los responsables de la política monetaria se muevan para contrarrestar la debilidad económica.
Kashkari calificó este escenario de poco realista y dijo que los responsables de la política monetaria están "unidos" en su determinación de reducir la inflación hasta el objetivo del 2% de la Fed. El riesgo de recesión "no me disuadirá" de abogar por lo necesario para lograrlo, dijo.
(Información de Ann Saphir; información adicional de Howard Schneider, Lindsay Dunsmuir y Akriti Sharma; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)