Madrid, 26 abr (.).- El director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce, ha advertido este lunes de que los jóvenes "se han beneficiado menos de la aplicación de los ERTE" que otros colectivos, debido principalmente a la temporalidad.
En una jornada organizada por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), el Observatorio de la Realidad Financiera (ORFIN) y la Universidad de Alcalá, Arce ha detallado que en un primer momento "los jóvenes se pudieron acoger en menor medida" a los ERTE, sobre todo los que tenían contratos temporales o en sectores más afectados por la pandemia como el turismo.
Posteriormente, con datos del cuarto trimestre de 2020, la probabilidad de encontrar un empleo para un joven era mayor "si no estabas en ERTE que si estabas en ERTE", probablemente porque los acogidos a esta medida trabajaban en sectores con restricciones, lo que demuestra que esta herramienta "no estaba facilitando la reinserción de los jóvenes".
En general, la pandemia "está impactando de nuevo con especial intensidad en las rentas laborales de los más jóvenes", ha señalado, que trabajaban en sectores más "sociales" sin posibilidad del teletrabajo, lo que ya ha elevado el número de hogares jóvenes sin ingresos.
Para muchos jóvenes "esta pandemia viene a llover sobre mojado", ha advertido, porque la crisis anterior ya afectó a su proceso formativo -algo que no se ha repetido con la pandemia-, la capacidad de encontrar empleo de los universitarios, la renta de los hogares, la natalidad o el acceso y propiedad de la vivienda.
Arce ha advertido de que algunos de los retos que arrastra la economía española desde hace décadas se han "magnificado" con la pandemia, aunque hay "palancas potencialmente potentes" para afrontarlos.
Entre ellas, ha aludido a los fondos europeos, a la necesidad de implementar un agenda de reformas ambiciosa y consensuada, porque se tendrá que implementar a lo largo de muchos años, o un plan de reequilibrio de las cuentas públicas "cuando la recuperación esté suficientemente asentada" porque "vendrá otra crisis y convendría que nos pillara con márgenes fiscales suficiente".
En materia de pensiones, ha señalado que el envejecimiento de la población se va a acelerar, lo que exigirá implementar reformas que podrían ser difíciles de llevar a cabo en "un sistema donde va a haber cada vez más mayores" que además "políticamente se movilizan más".
En cualquier caso, ha subrayado que si se quiere mantener la "generosidad" actual será necesario incrementar las contribuciones y que, de la misma manera, si se quieren mantener las contribuciones se tendrá o bien que reducir los beneficios del sistema o asumir un déficit "muy grande" en la Seguridad Social.
Ha añadido que "las vidas laborales deberían ser cada vez más prolongadas" a medida que aumenta la esperanza de vida, algo que "debemos aceptar con absoluta naturalidad" y fomentar las capacidades que no se deterioran con la edad.
De cara al futuro, Arce cree que la situación económica va a estar determinada por varios riesgos, como la evolución de la pandemia y de la vacunación y, más a largo plazo, la incertidumbre en torno a cuestiones como el ahorro o la recuperación del turismo con la previsión de que "el efecto negativo de la crisis sobre la economía va a ser relativamente persistente".