Por Francesco Canepa y Balazs Koranyi
14 sep (Reuters) -El Banco Central Europeo subió el jueves las tasas de interés por décima vez consecutiva a un récord de un 4% para contrarrestar la persistente inflación, pero señaló que es probable que ponga fin a más de un año de endurecimiento de su política monetaria.
El banco central de los 20 países que utilizan el euro también elevó sus previsiones de inflación, que ahora espera que descienda más lentamente hacia su objetivo del 2% en los próximos dos años, a la vez que recortó las de crecimiento económico.
Con ello se ilustró el dilema al que se enfrentaba el BCE en la reunión: los precios siguen subiendo a más del doble de su tasa objetivo, pero con unos elevados costos de endeudamiento y una desaceleración en China, la actividad económica general atraviesa por dificultades.
"Sobre la base de su evaluación actual, el Consejo de Gobierno considera que los tipos de interés oficiales del BCE han alcanzado niveles que, mantenidos durante un período suficientemente largo, contribuirán sustancialmente a que la inflación vuelva a situarse oportunamente en el objetivo", señaló el BCE en un comunicado.
Ahora se espera que esto ocurra más lentamente que en las anteriores proyecciones del BCE de junio, con una inflación del 5,6% en 2023, del 3,2% en 2024 y del 2,1% en 2025.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, no descartó del todo una nueva alza en caso de necesidad y dijo que las tasas tendrían que permanecer en niveles restrictivos durante algún tiempo.
"La atención se va a centrar, en adelante, en la duración, pero eso no quiere decir -porque no podemos decirlo ahora- que estemos en el punto máximo", afirmó en rueda de prensa.
Lagarde reconoció que algunos miembros del consejo del BCE habían argumentado en contra de la última subida de tipos, pero añadió: "Hubo una sólida mayoría de gobernadores de acuerdo con la decisión que hemos tomado".
Cuando se le pidió que comentara si la rebaja de las previsiones de crecimiento del BCE -con un crecimiento de la zona euro para este año de sólo el 0,7%- significaba que una recesión regional era ahora su escenario base, Lagarde insistió en que la ralentización era temporal.
"La recuperación que habíamos previsto para el segundo semestre de 2023 se ha retrasado", dijo. "Confiamos en que el crecimiento repunte en 2024".
INFLACIÓN PERSISTENTE
La actualización de la estimación de la inflación para 2024, de la que ya había informado Reuters, probablemente influyó en las discusiones, ya que los responsables políticos sopesaron el riesgo de que la actual, superior al 5%, se estanque en un nivel alto.
El aumento de 25 puntos básicos del jueves eleva el tipo que el BCE paga por los depósitos bancarios al 4%, el nivel más alto desde el lanzamiento del euro en 1999.
Hace sólo 14 meses, la tasa languidecía en un mínimo histórico del -0,5%, lo que significaba que los bancos tenían que pagar para dejar su efectivo a buen recaudo en el banco central.
Antes de la reunión de esta semana, los mercados monetarios esperaban que el tipo de depósito alcanzara un máximo del 4% antes de que baje en el segundo semestre del próximo año. 0#ECBWATCH.
Por el contrario, los mercados han descontado que los tipos se mantendrán sin cambios en la reunión de la próxima semana de la Reserva Federal de Estados Unidos, que empezó a subirlos antes y los ha elevado más que el BCE.
(Información de Tomás Cobos y Balazs Koranyi; Editado en español por Flora Gómez y Javier López de Lérida)