Tokio, 24 oct (.).- El Banco de Japón (BoJ) realizó este martes una nueva compra extraordinaria de bonos estatales en un aparente intento por frenar la reciente tendencia al alza del rendimiento a largo plazo, que superó en la víspera la barrera del 0,860 %.
La operación, sobre la que a falta de anuncio oficial se hizo eco la agencia de noticias local Jiji, estaría valorada en 400.000 millones de yenes (unos 2.500 millones de euros), la misma cifra que el banco central japonés desembolsó la semana pasada en una operación idéntica en medio del alza continua de los rendimientos.
En el momento de aquella operación, el pasado miércoles, el rendimiento del bono nipón a más de 10 años tocó el 0,815 % y desde entonces ha continuado subiendo, manteniéndose en niveles que no se veían desde hace más de una década.
Tras la operación de hoy, el rendimiento del bono estatal japonés a largo plazo se moderó momentáneamente hasta el 0,855 %.
La operación tiene lugar en medio de la continua subida de los rendimientos de los bonos japoneses a largo plazo, que el nutrido programa de compras del banco central no ha logrado contener.
La subida se ha pronunciado entre las especulaciones de que la entidad crediticia japonesa podría volver a revisar su control de la curva de rendimientos en su reunión mensual de la próxima semana.
El banco central japonés elevó efectivamente en julio el rango superior de fluctuación que considera tolerable para los rendimientos de esos títulos desde el 0,5 % al 1 %, como medida para paliar los efectos negativos de su política monetaria ultraflexible en el actual contexto de inflación y debilidad del yen.
Desde entonces el alza de estos rendimientos nipones ha sido continua, aunque se mantienen muy por debajo de los de Estados Unidos u importantes economías, en línea con las divergentes políticas monetarias que aplican, con Japón reticente a abandonar sus tipos de referencia negativos desde hace más de una década.