Río de Janeiro, 1 abr (.).- Brasil acumuló en los tres primeros meses del año un superávit en su balanza comercial de 6.135 millones de dólares, el menor saldo para el período en los últimos 5 años y una reducción causada en parte por la caída del comercio mundial debido a la COVID-19, informó este miércoles el Gobierno.
El saldo positivo en la diferencia entre las exportaciones y las importaciones de la mayor economía sudamericana en el primer trimestre fue en un 32,0 % inferior al de los tres primeros meses de 2019 (9.025 millones de dólares), según el Ministerio de Economía.
El superávit comercial de Brasil no era tan reducido para un primer trimestre desde los tres primeros meses de 2015, cuando el saldo positivo fue de 5.600 millones de dólares.
"El comportamiento del trimestre fue influenciado, entre otros factores, por un comercio mundial poco dinámico, agravado por la pandemia de la COVID-19", explicó Herlon Brandao, subsecretario de Estadísticas de Comercio Exterior del Ministerio, en un comunicado.
De acuerdo con Brandao, las exportaciones brasileñas se redujeron en el trimestre, principalmente en marzo, no solo por la caída de la demanda de los otros países sino también por el desplome de los precios de materias primas y alimentos de los que Brasil es un importante abastecedor mundial.
Según el Ministerio, el precio de la soja exportada por Brasil cayó un 4,0 % frente al mismo trimestre de 2019, el del petróleo un 9,9 % y el de la celulosa un 29,1 %.
"Los países han adoptado medidas severas para disminuir el ritmo de contagio de la enfermedad y el bloqueo total que China impuso en Wuhan se convirtió en modelo para otros países. Además del cierre de fronteras, diferentes países adoptaron medidas como la cancelación de eventos, el cierre de fábricas y comercios y la restricción a la circulación de las personas", afirmó el funcionario.
Según Brandao, las exportaciones brasileñas hacia China crecieron un 4,3 % en el primer trimestre pese a las restricciones impuestas por el gigante asiático, que es el principal socio comercial de Brasil, pero ese aumento obedeció al incremento de los embarques de pocos productos, como carnes, hierro, soja y algodón.
Mientras que las exportaciones brasileñas cayeron un 2,1 %, desde 51.168 millones de dólares en el primer trimestre de 2019 hasta 50.095 millones de dólares en el mismo período de 2020, las importaciones aumentaron un 4,31 %, desde 42.143 millones de dólares hasta 43.960 millones de dólares.
Tan sólo en marzo, Brasil registró un superávit de 4.713 millones de dólares, con un crecimiento del 9,7 % en la comparación con el del mismo mes del año pasado (4.296 millones de dólares) y un salto del 52,3 % frente al de febrero (3.096 millones de dólares).
Las exportaciones subieron un 10,4 % en marzo frente al mismo mes de 2019, hasta 19.239 millones de dólares, mientras que las importaciones aumentaron 10,6 %, hasta 14.525 millones de dólares.
Sin embargo, teniendo en cuenta el promedio diario, ya que marzo de 2020 tuvo tres días hábiles más que en 2019, las exportaciones se redujeron en un 4,7 % en marzo, hasta 874,5 millones de dólares, y las importaciones un 4,5 %, hasta 660,2 millones de dólares.
"Al analizar la trayectoria del promedio diario de exportaciones es posible observar que las ventas a China presentaron un nivel bajo en enero, probablemente por la evolución de la COVID-19 en el país asiático, y se recuperaron en los meses siguientes", dijo Brandao.
En contrapartida las exportaciones hacia Estados Unidos, Unión Europea y Argentina, que escoltan a China como mayores socios comerciales de Brasil, crecieron entre enero y febrero y cayeron en marzo, "probablemente por las medidas para frenar la pandemia".
El Ministerio reconoció que la caída de las exportaciones provocada por la reducción de la actividad mundial por la COVID-19 tal vez solo se reflejará en los próximos meses, ya que muchos de los embarques fueron contratados antes de la crisis.
La cartera admitió igualmente que los datos del comercio exterior tienden a empeorar en los próximos meses ante la esperada caída de los flujos mundiales como consecuencia de la crisis sanitaria.
"La reducción de la expectativa de crecimiento del PIB brasileño (hasta 0 % en 2020) y la devaluación del real (de 30 % en lo que va del año) deberán reducir la demanda por las importaciones, especialmente de bienes industrializados", dijo el funcionario.
"Las exportaciones, por su parte, serán más afectadas por la caída de los precios internacionales de los principales productos de la pauta exportadora brasileña como consecuencia del bajo dinamismo de la economía mundial", agregó.
Tras revisar sus proyecciones para este año debido a la pandemia, el Gobierno prevé que el superávit de la balanza comercial de Brasil caerá desde 48.036 millones de dólares en 2019 hasta unos 33.500 millones de dólares en 2020.
Los economistas del mercado, por su parte, prevén para este año un superávit comercial de 35.250 millones de dólares.