Bruselas, 28 jun (EFE).- La única manera de evitar la suspensión de pagos de Grecia es la aprobación esta semana del plan de austeridad del Gobierno socialista por parte del Parlamento griego, porque no hay un plan B, insistió hoy la Comisión Europea (CE).
"Confío en que los líderes políticos de Grecia estén plenamente conscientes de la responsabilidad que tienen para evitar la suspensión de pagos", afirmó el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, en un comunicado.
El Parlamento griego empezó el lunes el debate sobre las nuevas medidas de austeridad con la incertidumbre de si el Gobierno socialista logrará que la Asamblea las apruebe ante las deserciones en sus filas y la creciente presión social.
De ello depende la entrega de un quinto tramo de ayuda externa de 12.000 millones de euros para pagar sueldos y pensiones en julio.
Sin ese dinero, Grecia no podrá afrontar sus pagos y se convertiría en el primer país de la Eurozona que suspende pagos, lo que puede generar un efecto dominó que arrastre a la banca europea y acabe golpeando a otros países del Viejo Continente.
"La única manera de evitar la inmediata suspensión de pagos es que el Parlamento respalde el programa económico revisado", enfatizó Rehn, en otro llamamiento urgente a los diputados griegos para que aprueben el impopular conjunto de medidas de austeridad y privatizaciones del primer ministro, Yorgos Papandréu, para los próximos cinco años por valor de 78.000 millones de euros.
El comisario europeo también se dirigió "a aquellos que especulan sobre otras opciones", sobre planes alternativos.
Varios medios de comunicación publicaron el lunes que la Eurozona está trabajando en un plan B por si el Parlamento griego rechaza el programa de austeridad.
"Déjenme decirlo claramente: no hay un plan B para evitar la suspensión de pagos", recalcó Rehn.
"La Unión Europea sigue estando preparada para ayudar a Grecia, pero Europa solamente puede ayudar a Grecia si Grecia se ayuda a sí misma", agregó.
El plan griego, acordado con la troika -el Fondo Monetario Internacional, el Banco Central Europeo y la Comisión Europea- se votará en dos sesiones diferentes, la primera, el miércoles, es la que debe dar el visto bueno al marco general, mientras que el jueves se ratificará una ley adicional para su aplicación.
Rehn aseguró que la preparación para un segundo plan de rescate, calculado en unos 110.000 millones de euros, se intensificará en las próximas semanas.
"Creo que las propuestas constructivas que llegan de diferentes sectores de la sociedad griega deben ser escuchadas y tomadas en cuenta. Es vital que se cree un consenso social más amplio y un acuerdo entre los diferentes partidos sobre las reformas que son necesarias para que Grecia vuelva a la senda del crecimiento y el desarrollo sostenible", indicó el comisario.
Los griegos y sus representantes democráticamente elegidos afrontan una elección difícil, dijo.
"Reformar la economía es ciertamente un desafío, pero sigue siendo una alternativa mucho mejor que una suspensión de pagos, que afectaría a los más desventajados y vulnerables", señaló.
Por ello, instó una vez más a los políticos griegos a "asumir esta responsabilidad y al mismo tiempo analizar los próximos pasos a dar y crear el consenso necesario". EFE