París, 15 oct (.).- El Índice de Precios al Consumo (IPC) registró un importante freno en Francia en septiembre pasado, cuando se contrajo un 1,2 %, lo que situó el índice anual en el 1,1 %, indicó este martes el Instituto Nacional de Estadística (INSEE).
Se trata de la caída más elevada de la inflación en un mes desde que existe este dato, en 1990, precisó el INSEE, que señaló que el descenso de los precios se produce después de que en agosto subieran un 0,5 %.
El abaratamiento de los servicios, de un 2,2 %, motivada por la caída de temporada de los precios de los transportes (-13,5 %), sobre todo de los billetes de avión (-24,8 %), pero también de la hotelería (-17,2 %) tras el periodo olímpico, fue la principal causa del descenso de la inflación.
Pero también contribuyó de forma decisiva la bajada del 1,8 % de los precios de la energía esencialmente por el abaratamiento del petróleo (-3,5 %).
Los productos manufacturados, por su parte, se encarecieron un 0,5 %, pero menos de lo que lo habían hecho en agosto (1,4 %), mientras que el tabaco se mantuvo estable.
En comparación anual, los precios subieron un 1,1 %, una moderación con respecto al mes anterior, cuando lo habían hecho un 1,8 %, básicamente por la bajada de la energía (-3,3 %) y la desaceleración de los servicios (+2,4 % tras el 3 % de agosto), mientras que los productos manufacturados, los alimentos y el tabaco se mantuvieron estables.
La inflación subyacente, por su parte, se situó en el 1,4 % en septiembre, tras el 1,7 % de agosto, mientras que el IPC armonizado fue del 1,3 % tras el 0,6 % del mes anterior.