Santo Domingo, 21 ago (EFE).- El ex vicegobernador del Banco
Central de la República Dominicana Félix Calvo, acusado de desfalco
por la distracción de 10.600 millones de pesos (294,8 millones de
dólares) de esa entidad en 2003, calificó hoy de "espuria" la
imputación contra él, que consideró "un desatino".
La acusación, que también afecta al ex gobernador del Banco
Central José Loís Malkún, al ex gerente César Apolinar Veloz y al ex
consultor jurídico Manuel Rubio Cristóforis, les imputa cargos por
prevaricación, desfalco, asociación de malhechores, falsedad en
escritura pública y abuso de confianza.
La Dirección Nacional de Persecución de la Corrupción
Administrativa (DPCA) señala que cuando el banco Bancrédito empezó a
tener problemas de liquidez -que culminaron con su quiebra en 2003-
el Banco Central le proporcionó adelantos y "redescuentos" por valor
de más de 20.000 millones de pesos (556,3 millones de dólares).
La acusación explica que, como consecuencia de la venta del Grupo
Financiero Nacional (GFN), el 2 de julio de 2003 se suscribió un
contrato tripartito y "fueron entregados 18 pagarés" por importe de
10.663.341 pesos.
Esos pagarés eran "relativos a los títulos de las carteras de
crédito" de las empresas vinculadas a Bancrédito, "que estaban
siendo adquiridas por el Estado" a través del Banco Central.
Pero los pagarés "fueron sustraídos de los archivos del Banco
Central y utilizados para favorecer a particulares que los han usado
para saldar otras acreencias (créditos) en perjuicio del interés
público", agrega la denuncia.
Félix Calvo aseguró hoy en un comunicado que en su momento se
negoció la entrega de los pagarés entre el Banco Central y GFN para
que la primera entidad retirara la querella contra el entonces
presidente de Bancrédito, Manuel Arturo Pellerano Peña, quien cumple
condena por fraude.
Se preguntó porqué, en ese caso, el Banco Central utiliza los
citados pagarés en contra de los acusados.
También se preguntó porqué, si el Banco Central tiene constancia
"de que los pagarés están en posesión de GFN" qué interés tiene "en
esgrimirlos como prueba de un acto doloso del que, por lógica
jurídica elemental, no podría excluir a Manuel Arturo Pellerano
Peña".
Según Calvo, tras la querella de la DPCA podrían estar sectores,
también involucrados en otros fraudes bancarios denunciados en 2003
en el país, interesados en hacer fracasar las negociaciones entre
Pellerano Peña y el Banco Central.
"Pero toca al Banco Central y a la DPCA explicar por qué vía han
llegado a este atolladero", concluye el ex vicegobernador.
Por su parte, Malkún explicó hoy que en la investigación sobre
este caso se determinó que el ex consultor jurídico Manuel Rubio
Cristóforis fue quien devolvió los pagarés a Pellerano sin
conocimiento de los demás funcionarios y agregó que existe una carta
que lo acredita, según el periódico en línea Clave Digital.
Malkún aseguró que en su momento declaró ante la DPCA y detalló
lo que sabía sobre los pagarés, por lo que le extraña que este
departamento le haya sometido a la Justicia, informan medios
locales. EFE