San José, 10 feb (EFE).- Costa Rica y China concluyeron hoy con
éxito y tras seis rondas de diálogo la negociación de un Tratado de
Libre Comercio (TLC) que será firmado en abril en Pekín, informaron
fuentes oficiales.
El ministro de Comercio Exterior de Costa Rica, Marco Vinicio
Ruiz, afirmó en rueda de prensa sentirse "satisfecho" por los
acuerdos logrados, pues han dado como resultado un tratado
"balanceado", que protege las sensibilidades de ambos países pero
abre oportunidades importantes a los productores.
"Este tratado es un hito para la política comercial de Costa
Rica", señaló Ruiz, al recordar que en América solo Chile y Perú
cuentan con un TLC con el gigante asiático.
El jefe negociador costarricense, Fernando Ocampo, explicó que el
acuerdo es asimétrico, es decir, las condiciones de desgravación y
acceso son diferentes para cada país.
Una vez entre en vigor el tratado, detalló Ocampo, Costa Rica
dejará entrar de manera inmediata y libre de aranceles el 58 por
ciento de los productos que ya importa de China, en su mayoría
materias primas, pero también productos electrónicos, insumos
agrícolas y electrodomésticos.
Un 32 por ciento de las importaciones desde China tendrá un plazo
de desgravación de cinco a diez años y un diez por ciento fue
excluido del acuerdo.
Entre las exclusiones destacan los productos lácteos, el café,
algunos plásticos y bienes metalmecánicos.
En el caso de China, el país asiático no aplicará aranceles de
entrada al 99,6 por ciento de los bienes que ya compra a Costa Rica,
aunque la mayoría son productos fabricados por la trasnacional
Intel.
China excluyó, por ejemplo, el azúcar, producto que, según
Ocampo, no han abierto en ninguna de las negociaciones que mantienen
alrededor del mundo.
El café costarricense podrá ingresar libre de impuestos a China
en un plazo de diez años, las carnes en cinco años, y otros
productos como plantas, flores, cueros y salsas, de forma inmediata.
Ruiz destacó que aunque actualmente la variedad de productos que
Costa Rica vende a China es limitada, el TLC será precisamente un
instrumento para facilitar el crecimiento y la diversificación, pues
el país contará con acceso libre inmediato para el 66 por ciento de
las líneas arancelarias (bienes totales producidos) del país.
En un plazo de diez años, el acceso se elevará al 94 por ciento
del universo arancelario costarricense, lo que representa múltiples
oportunidades para hacer nuevos negocios, aseguró.
El TLC incluye, además, mecanismos de salvaguarda en favor de
Costa Rica, entre los que destaca uno que permite las importaciones
de fríjol desde China únicamente en épocas del año que no hay
producción local.
El ministro enfatizó que con este TLC, más el que el país
concluyó semanas atrás con Singapur, Costa Rica se verá beneficiada
al contar con un "acceso preferencial a Asia, el mercado más
dinámico y de mayor crecimiento del mundo".
Durante marzo se realizará la revisión legal de los textos y en
abril se espera que Ruiz viaje a Pekín para firmar el acuerdo.
Tras su firma, el TLC debe ser ratificado por el Congreso
costarricense, mientras que en China debe ser aprobado por el
Ejecutivo para entrar en vigor.
Ambos países establecieron relaciones diplomáticas en julio de
2007 y desde ese momento han mantenido una estrecha relación
política, de cooperación y comercial. EFE