Pekín, 23 sep (.).- La Cámara de Comercio de la Unión Europea en China mostró hoy su preocupación por el giro hacia la autosuficiencia propugnado por Pekín y expresó dudas sobre "la trayectoria del futuro crecimiento" del país asiático.
"Hay indicios de que China se está encerrando en sí misma, y las empresas europeas no están seguras de hasta qué punto serán capaces de contribuir al futuro crecimiento del país. Se temen salidas del mercado", apuntó la Cámara en su informe anual.
El organismo argumentó que el decimocuarto plan quinquenal de China, aprobado en marzo de 2021, busca "aumentar e incluso lograr la autosuficiencia", lo que implica "desviarse del espíritu de reforma y apertura iniciado en la década de 1970".
"Supone que dependerán cada vez más de sus propias empresas para dar servicios a su vasto mercado. China parece dispuesta a asumir el coste de continuar por este camino, pero el daño que haga a su economía a largo a plazo no es aceptable", aseguró la Cámara.
En ese sentido, el presidente de la Cámara, el alemán Joerg Wuttke, teme que la economía del país crezca "a un nivel más bajo si apuesta por favorecer ese enfoque más aislacionista" y se aleja de "reformas audaces" de corte aperturista.
"Nuestras empresas juegan un papel fundamental en la economía de China", asegura Wuttke, que aboga por "un entorno empresarial óptimo que ayude al país asiático a alcanzar su máximo potencial".
Con todo, el organismo indica en su informe que "pese a las dificultades derivadas de la pandemia de la covid y a las crecientes tensiones geopolíticas", las empresas europeas en China obtuvieron, en general, "buenos resultados" y siguen "completamente comprometidas" con el mercado chino.
En marzo de este año, la sesión del Legislativo chino aprobó el decimocuarto plan quinquenal (2021-2025), que propugna la estrategia conocida como "circulación dual" para dividir la economía en dos partes de modo que siga aprovechando el comercio internacional mientras protege su mercado interno.
En este proyecto destaca la apuesta por la autosuficiencia, que ha de entenderse en el contexto de la guerra comercial con Estados Unidos, país que trató de cortar el acceso de China a tecnologías clave y sancionó a gigantes del sector en el país asiático como Huawei o Tencent (HK:0700).
El plan pasa por establecer dentro del país asiático cadenas de suministro en sectores clave -además de manufactura, alimentos básicos o energía- mientras se siguen importando conocimientos tecnológicos y se apuesta por el desarrollo y la investigación.
Pekín, por su parte, asegura que la circulación dual no se basa en cerrarse al exterior sino que es una estrategia de transición hacia la demanda doméstica mientras el comercio exterior mantiene su importancia.
Un crecimiento "de alta calidad, sostenible y verde" y transferir el peso sobre la economía de industrias contaminantes hacia el sector servicios son otros de los impulsos para el desarrollo que las autoridades chinas llevan tiempo propugnando.