Moscú, 17 ago (.).- La economía rusa creció un 1,6 % en la primera mitad del año en comparación con el mismo período del año anterior, informó hoy el Servicio Estatal de Estadísticas.
Los pronósticos del Gobierno ruso eran más halagüeños, pero el producto interior bruto (PIB) sólo creció un 1,1 % en junio después de un 2,2 % de alza en mayo.
Con todo, el Ministerio de Economía mantiene su pronóstico de crecimiento anual del 1,9 % después de que el PIB creciera un 1,8 % en julio gracias al aumento de la producción industrial.
En el primer trimestre del año la economía creció un 1,3 %, muy por debajo de las previsiones oficiales, pese a que el presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró a principios de año que el país había entrado en una nueva fase de crecimiento acelerado tras dos años de recesión (2015 y 2016).
Según los expertos, la economía está obligada a convivir con las sanciones, como las adoptadas este año por EEUU contra siete oligarcas rusos y las corporaciones que dirigen y que provocaron a mediados de abril un fuerte desplome de las bolsas rusas y una brusca devaluación de la moneda nacional, el rublo.
Putin ha encomendado al Ejecutivo la tarea de que Rusia, país muy afectado desde hace años por la caída de los precios de los hidrocarburos, se convierta para 2024 en una de las cinco primeras economías del mundo.