Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 28 abr (Reuters) - Es probable que el crecimiento económico de Estados Unidos se haya ralentizado bruscamente en el primer trimestre debido a que la oleada de casos de COVID-19 frenó la actividad, pero conservó una fuerza subyacente suficiente para mantener la expansión en un contexto de inflación y tipos de interés en alza.
El ritmo de crecimiento, que se prevé sea el más lento desde que terminó la recesión provocada por la pandemia hace casi dos años, también reflejaría un aumento de las importaciones. Los economistas están divididos sobre si los inventarios contribuirán al crecimiento del producto interior bruto, después de que representaran la mayor parte de la aceleración del PIB en el cuarto trimestre.
El avance del Departamento de Comercio sobre el PIB del primer trimestre, que se publicará el jueves, podría dar lugar a advertencias de estanflación y recesión por parte de algunos sectores, pero los economistas advirtieron que una cifra de crecimiento baja no sería una imagen real de la economía, señalando que otras medidas de la producción, como las horas trabajadas agregadas y la producción industrial, mostraron un crecimiento sostenido el pasado trimestre.
"Tenemos que recordar el contexto de por qué se está desacelerando", dijo James Knightley, economista jefe internacional de ING (AS:INGA) en Nueva York. "La ola de ómicron, que afectó a la confianza y a los movimientos de la gente, lo explica en gran medida. Y ahora que hemos salido del otro lado en forma razonable, deberíamos esperar un mejor crecimiento para el segundo trimestre".
Según una encuesta de Reuters entre economistas, el crecimiento del PIB aumentó probablemente a una tasa anualizada del 1,1% el pasado trimestre. Ello supondría un gran descenso respecto al fuerte ritmo del 6,9% registrado en el cuarto trimestre. Las estimaciones oscilan entre una tasa de contracción del 1,4% y un ritmo de crecimiento del 2,6%.
Se espera que la Reserva Federal suba los tipos de interés en 50 puntos básicos el próximo miércoles, y que empiece a recortar pronto sus tenencias de activos. El banco central estadounidense subió su tipo de interés oficial en 25 puntos básicos en marzo, la primera subida en más de tres años, como parte de su lucha contra la inflación. Los precios al consumo anuales aumentaron en marzo a su ritmo más rápido en 40 años.
(Reporte de Lucia Mutikani; Edición de Dan Burns y Paul Simao, traducido por Tomás Cobos)