VARSOVIA, 28 sep (Reuters) - El visado de trabajo de tres meses propuesto por el primer ministro británico, Boris Johnson, para los camioneros europeos no es un trato lo suficientemente bueno como para convencer a Jakub Pajka, camionero polaco de 35 años, de que vuelva a Reino Unido. Y no es el único.
La escasez de camioneros tras el Brexit, estimada en unos 100.000, a medida que disminuye la gravedad de la pandemia del COVID-19, ha sembrado el caos en las cadenas de suministro británicas de todo tipo de productos, desde los alimentos hasta el combustible, y ha hecho surgir el fantasma de las interrupciones y las subidas de precios en el periodo previo a la Navidad.
El gobierno británico anunció el domingo un plan para expedir visados temporales a 5.000 camioneros extranjeros como respuesta a la aguda escasez de camioneros que hizo que los surtidores de las gasolineras se quedaran vacíos en las ciudades de todo el país. Los visados expirarán el 24 de diciembre.
Pajka, que dejó su trabajo en Reino Unido cuando éste salía de la Unión Europea, dijo que tres meses no eran suficientes para que valiera la pena.
"No, gracias, señor primer ministro, no aprovecharé esta oportunidad. Ningún conductor quiere trasladarse sólo tres meses para facilitar a los británicos la organización de sus vacaciones", dijo sentado al volante de su camión rojo en un estacionamiento a las afueras de la capital polaca, Varsovia.
El dinero adicional no podía compensar el esfuerzo de cambiar de país, la amenaza que suponen los inmigrantes que intentan cruzar el Canal de la Mancha a bordo de un camión o la separación de su familia, añadió.
"El dinero que se puede ganar en Reino Unido no compensa tanto al conductor por todas las cosas peligrosas que le ocurren allí", dijo señalando las refriegas con migrantes que presenció en los puertos de Calais y Dunquerque.
En otro estacionamiento a las afueras de Varsovia, Jacek Rembikowski, un camionero de 60 años con 25 de experiencia, también dijo que el Brexit influyó de alguna manera en su decisión de volver a casa después de trabajar en Reino Unido durante siete años.
A pesar de su sed de aventura y sus buenos recuerdos conduciendo desde "Noruega hasta Portugal", dice que ahora prefiere quedarse en Polonia.
"(Había) una incertidumbre sobre cómo seremos tratados en esta situación", dijo. "Si el Brexit sacudirá no sólo el sector, sino también si se seguirá queriendo a los conductores".
(Reporte de Alicja Ptak y Kacper Pempel; editado en español por Benjamín Mejías Valencia/Gabriela Donoso)