Managua, 11 mar (EFE).- Las patronales nicaragüenses hicieron público hoy, por primera vez, que aceptarían un aumento del 8 % al 9 % en el salario mínimo, a dos días de que inicie la última ronda de discusiones con el Gobierno sandinista y grupos sindicales.
"Como ya tenemos un acuerdo para zonas francas de un 8 %, hemos partido de esa realidad, y ese es el piso por donde se tiene que dar el aumento, que hemos mantenido en un dígito", dijo a la prensa el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri.
La posición del Cosep, la principal cúpula empresarial del país, fue revelada después de que el sector sindicalista anunciara que está dispuesto a negociar a partir de un piso del 10 %, y no del 14 %, como sus dirigentes habían anunciado.
El día límite establecido por la ley para que las patronales, el Gobierno y los sindicalistas lleguen a un acuerdo es el próximo jueves, tras ocho rondas previas infructuosas.
"Hemos mantenido la posición de un dígito, no porque estemos en contra de que se incremente el salario, sino que, si me suben el salario mínimo en un 10 %, significa que tengo que sacar a una persona del empleo formal", sostuvo Aguerri.
Actualmente, el salario mínimo promedio en Nicaragua equivale a 155,76 dólares.
El aumento del salario mínimo beneficiará a 100.000 personas, según datos del Cosep.