MADRID (Reuters) - Entre seis o siete grupos de las 15 entidades con las que ha contactado el gestor aeroportuario español Enaire (parte de Aena) han expresado interés en convertirse en inversores de referencia para la salida a bolsa de la compañía, prevista para noviembre, dijo el viernes el secretario de Estado de infraestructuras, Rafael Catalá.
Los potenciales inversores, fundamentalmente fondos de inversión, han de presentar antes del ocho de octubre sus ofertas vinculantes para hacerse con una participación conjunta de hasta el 21 por ciento del operador aeroportuario, en bloques de entre el 5 y el 11 por ciento del capital.
"El día 8 de octubre es el plazo para la formalización de ofertas de los inversores de referencia, eso va avanzando, estamos trabajando en la elaboración del folleto", explicó Catalá.
"Estamos trabajando con una lista larga de unos 15 que es con los que se han contactado, (...) han manifestado interés en torno a 6 o 7 y esos tienen que poner una oferta vinculante", agregó.
Con la venta de un 49 por ciento de Enaire (la antigua Aena) se prevé que el Gobierno capte entre 2.000 y 2.500 millones de euros, en una operación que tendrá además del mencionado tramo para inversores de referencia, otro tramo para inversores institucionales y una pequeña participación destinada a particulares.
Los inversores de referencia entrarán en el capital de la operadora al mismo precio de la OPV.
UNA OPERACIÓN CON INTERROGANTES
Analistas han mostrado sin embargo su escepticismo ante una operación que incluye un total de 46 aeropuertos, de los cuales consideran rentables sólo 4 instalaciones, pese a que el grupo presentó por primera vez en su historia beneficios de 597 millones de euros en 2013.
Se espera que el cierre de la operación se haga el próximo mes de noviembre, después de que el pasado martes se produjera un encuentro con analistas e inversores para explicarles los detalles de la salida a bolsa.
"Hay cuatro aeropuertos buenos (Madrid, Mallorca, Málaga y Barcelona) y el resto son cuando menos regulares. Además, el control de la gestión lo retiene el Estado, lo que hace la operación menos atractiva para los gestores puros de infraestructuras", dijo un analista que pidió el anonimato.
De hecho, las principales constructoras/concesionarias españolas han rehusado participar en el proceso por la falta de control sobre el activo.
Entre los inversores interesados en el activo y hasta ahora no desvelados, habría grandes fondos de inversión internacionales, aunque algunos se tendrán que quedar fuera ya que la operación exige un periodo de permanencia de un año, algo incompatible con las reglas de inversión de determinados fondos, explicó el analista.
Fuentes conocedoras de la operación dijeron que Ryanair, que dijo en el pasado estar interesado en el proceso, no ha presentado oferta y que otros inversores como el grupo March o Ferrovial sí habían mostrado interés en participar.
Sin embargo el interés de está última sociedad sería limitado a no ser que hubiera una promesa de participar en una segunda fase en la gestión, explicó otra fuente, ya que Ferrovial suele buscar operar las infraestructuras en las que invierte.
Santander, BBVA, Bank of America, Merrill Lynch, Goldman Sachs y Morgan Stanley han sido elegidos para llevar a cabo el proceso.