Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 14 jul (Reuters) - Los precios al productor en Estados Unidos subieron en junio, acumulando la mayor ganancia anual en más de 10 años y medio, lo que sugiere que la inflación podría seguir alta mientras la sólida demanda impulsada por la recuperación económica de la pandemia de COVID-19 presiona la cadena de suministro.
El informe del Departamento de Trabajo del miércoles siguió al que mostró el martes que los precios al consumidor tuvieron su mayor alza en 13 años en junio. Sin embargo, hay indicios de que la inflación está cerca de tocar su pico. Los precios al productor subyacentes subieron a un ritmo moderado sobre una base mensual en junio.
En comentarios preparados para ser pronunciados ante el Congreso, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo que "la inflación ha avanzado de forma notable y probablemente seguirá siendo elevada en los próximos meses antes de moderarse". Powell ha mantenido desde hace tiempo que la alta inflación es transitoria, una idea compartida por la mayoría de economistas y la Casa Blanca.
El índice de precios al productor (IPP) para demanda final aumentó un 1,0% el mes pasado, tras ganar un 0,8% en mayo. Un alza del 0,8% en el costo de los servicios fue responsable de casi el 60% del incremento del IPP en junio. Los servicios aumentaron un 0,6% en el mes anterior. Los precios de los bienes treparon un 1,2% después de acelerarse un 1,5% en mayo.
En los 12 meses hasta junio, el IPP escaló un 7,3%. Esa fue la mayor subida interanual desde noviembre de 2010 y siguió un avance del 6,6% en mayo.
Precios más altos de las materias primas y los mayores costos laborales por la escasez de trabajadores disponibles están impulsando la inflación en las puertas de la fábrica.
Niveles de inventarios muy bajos por problemas en la cadena de suministro facilitan a los productores traspasar los costos más altos a los consumidores. Los sectores en el centro de la reapertura de la economía han experimentado grandes alzas de precios, aunque en junio hubo indicios de que la inflación se está extendiendo a otros segmentos.
Los economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que el IPP aumentaría un 0,6% en junio y un 6,8% interanual.
La Fed redujo su tasa de interés de referencia a casi cero el año pasado y está inyectando dinero a la economía a través de compras mensuales de bonos. Esa política monetaria ultralaxa, las vacunaciones contra el COVID-19 y casi 6 billones de dólares en ayuda gubernamental desde que comenzó la pandemia en Estados Unidos en marzo de 2020 están impulsando la demanda.
No obstante, es probable que la inflación esté cerca de su punto máximo. Excluyendo los componentes volátiles de alimentos, energía y servicios comerciales, los precios al productor subieron un 0,5%. El denominado IPP subyacente ganó un 0,7% en mayo, mientras que en los 12 meses hasta junio, se aceleró un 5,5%. Ese fue el mayor avance desde que el gobierno introdujo la serie en agosto de 2014, seguido de un aumento del 5,3% en mayo.
(Editado en español por Carlos Serrano)