Tras la declaración de victoria de Donald Trump en la carrera por recuperar la presidencia de EE. UU., surgen interrogantes sobre si cumplirá sus promesas de política exterior, que incluyen poner fin a la guerra en Ucrania en un día e imponer nuevos aranceles a las importaciones chinas.
Los partidarios de Trump sostienen que su postura de "paz a través de la fuerza" influirá en los líderes extranjeros y abordará lo que consideran un "mundo en llamas", una situación que atribuyen a la percibida debilidad de la administración del presidente Joe Biden.
Trump, conocido por sus políticas comerciales de "América Primero" y tendencias aislacionistas durante su presidencia de 2017-2021, no ha proporcionado muchos detalles sobre sus planes de política exterior. No obstante, sus leales afirman que su enfoque corregirá lo que ven como otros países aprovechándose de EE. UU.
Uno de los temas más apremiantes que enfrenta Trump es la guerra en Ucrania. El presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy ha expresado su apoyo al enfoque de Trump, que cree podría traer la paz a Ucrania. Trump ha criticado la gestión de Biden en la situación y ha sugerido un replanteamiento fundamental del propósito de la OTAN, incluso insinuando que los países que no cumplan con los objetivos de gasto podrían no ser defendidos bajo su liderazgo.
En Oriente Medio, el regreso de Trump podría significar mayor libertad de acción para Israel en sus conflictos, particularmente con Irán. La postura de la administración Biden sobre la seguridad de Israel ha sido firme, pero el enfoque de Trump podría carecer de las mismas consideraciones humanitarias. El mandato anterior de Trump vio la firma de los Acuerdos de Abraham y podría continuar los esfuerzos para normalizar las relaciones entre Israel y Arabia Saudita.
China es otro punto focal, con Trump proponiendo aumentar los aranceles, lo que podría tener repercusiones económicas. Sus mensajes anteriores sobre China han sido contradictorios, pero ha sugerido que una postura firme disuadiría a China de acciones agresivas hacia Taiwán.
Mientras Trump se prepara para su regreso a la Casa Blanca en enero, hay especulaciones sobre la composición de su equipo de seguridad nacional. Los críticos temen que pueda nombrar a leales en lugar de republicanos convencionales, lo que podría llevar a cambios significativos en las políticas y afectar a las instituciones federales que implementan las acciones de EE. UU. en el extranjero.
Reuters contribuyó a este artículo.
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