Tokio, 2 jul (.).- La multinacional japonesa Fast Retailing (T:9983) rechazó hoy las acusaciones presentadas contra su subsidiaria Uniqlo en Francia por supuestos trabajos forzados de la minoría uigur en China, y afirmó que esa práctica "no existe" en su cadena de suministro.
La empresa nipona reaccionó de este modo a la investigación abierta por la Fiscalía Nacional Antiterrorista de Francia sobre esta y otras multinacionales textiles, entre las que también se encuentran la española Inditex (MC:ITX), Sketchers y SMCP.
La investigación fue originada por una denuncia de una ong que acusa a estas empresas de "beneficiarse de crímenes contra la humanidad" contra la minoría uigur en la región china de Xinjiang (noroeste), según dijo el pasado jueves a Efe una fuente judicial francesa.
Aunque Uniqlo "no ha sido notificada" por las autoridades francesas sobre esta investigación, está dispuesta a "cooperar plenamente" con la misma con el objetivo de "reafirmar que no hay trabajo forzado en sus cadenas de suministro", afirmó en un comunicado este viernes.
La firma nipona "tiene una política de tolerancia cero con las violaciones de los derechos humanos", y reiteró que "ninguno de sus suministradores están localizados en la región de Xinjiang, ni sus instalaciones de producción empleadas en productos Uniqlo están ubicadas en ese área".
La empresa añadió que lleva a cabo auditorías con partes externas para asegurarse de que no se producen "violaciones de los derechos humanos" entre sus proveedores, y afirmó que en caso de detectar "pruebas" de este tipo de abusos, detiene sus negocios con ese suministrador de forma inmediata.
El Ejecutivo nipón, por su parte, evitó pronunciarse sobre la investigación al tratarse de la justicia de otro país, y señaló que Japón elaboró el pasado otoño "un plan de negocios y derechos humanos" destinado a promover las "prácticas responsables" entre las empresas nacionales, dijo el portavoz, Katsunobu Kato, en rueda de prensa.
En Xinjiang se produce aproximadamente el 20 % del algodón mundial y, según los denunciantes, las labores en el cultivo y recolección se realizan en parte con gracias al trabajo forzado al que son sometidos los uigures (una etnia centroasiática de religión musulmana) por parte de las autoridades chinas.
Uniqlo ya había negado anteriormente que contara con vínculos directos en su cadena de producción con Xinjiang, después de que las autoridades aduaneras estadounidenses denegaran la entrada en ese país de prendas de algodón manufacturadas en China bajo la sospecha de emplear materia prima procedente de la compañía Xinjiang Production and Construction Corps (XPCC).