Managua, 30 nov (EFE).- La Asamblea Nacional de Nicaragua aprobó hoy, con votación dividida, una reforma tributaria con la que espera acabar con la evasión fiscal anual de unos 416 millones de dólares, ampliar la base de contribuyentes, revisar las exoneraciones y el impuesto sobre la renta.
La ley de concertación tributaria, que ahora queda pendiente de la firma presidencial, fue apoyada por los 63 diputados sandinistas, mientras 20 legisladores opositores, que se retiraron del hemiciclo tras ser aprobada la norma en su totalidad, votaron en contra, uno se abstuvo y ocho no asistieron, dijo en el pleno el titular del Congreso, el oficialista René Núñez.
El presidente de la Comisión Económica de la Asamblea Nacional, el sandinista Walmaro Gutiérrez, explicó que uno de los objetivos de esa nueva reforma es reducir la evasión fiscal, calculada en unos 416 millones de dólares anuales.
También recaudar unos 166,5 millones de dólares más al eliminar las exoneraciones a algunos sectores e incrementar la base impositiva.
En el caso del impuesto sobre la renta (IR) a los asalariados, indicó que en la actualidad se aplica una exención a los empleados que tienen un salario anual menor a los 3.122 dólares y ese techo subirá ahora a los 4.163 dólares.
"Los 53 productos que componen la canasta básica se mantendrán libres de impuestos, como parte de los beneficios", señaló, por su lado, el sandinista José Figueroa, miembro de la Comisión Económica del Parlamento.
Figueroa aclaró, sin embargo, que se gravará con el 15% de Impuesto al Valor Agregado (IVA) a productos destinados a personas de alto poder adquisitivo, entre los que mencionó el arroz de calidad, filetes de carne y pollo, los aceite de oliva, de maíz y de ajonjolí, y el café 100 % puro.
Además, se fijó entre 13 dólares y 208 dólares la cuota fija anual de impuesto para los pequeños negocios con ingresos de unos 20.000 a 50.000 dólares al año.
Tampoco serán gravadas las remesas que envían los nicaragüenses que viven en el exterior a sus familiares, ni pequeñas pulperías (abastos), agregó.
Según el Gobierno, la reforma de "concertación tributaria" está enfocada en lograr una mayor productividad y competitividad, "una mayor inversión y mayor desarrollo económico" y eliminar "todas las distorsiones o elementos negativos que afectan el correcto desarrollo del sector económico".
Los opositores, que se retiraron del hemiciclo cuando se inició la segunda discusión del proyecto, por capítulo, rechazan la reforma bajo el argumento de que afecta principalmente a la clase media y trabajadora del país, al gravar con el IVA a los cinco alimentos explicados por Figueroa como de consumo de los más ricos.
También alegaron que no fue consultada con todos los sectores.
"Lo que el Gobierno pretende es anular la clase media de Nicaragua", denunció en el pleno el diputado opositor Eliseo Núñez, de la Bancada Democrática Nicaragüense (BDN).
Por su lado, el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri, dijo a los periodistas que esa reforma es "positiva", porque ordena el sistema impositivo en el país.
Valoró que la reforma incluye nuevos "tratamientos especiales" como a la Bolsa de Valores de Nicaragua al incluir un fondo de inversiones para atraer nuevos capitales al país.
El Cosep espera que la reforma mantenga la captación de la inversión extranjera directa (IED) en Nicaragua de 900 a 1.000 millones de dólares anuales.
Nicaragua captó 967,9 millones de dólares en IED en 2011 y este año calcula alcanzar los 1.000 millones de dólares, según cifras oficiales. EFE