Por Thorsten Severin y Madeline Chambers
BERLIN (Reuters) - La canciller alemana, Angela Merkel, promoverá al gabinete a su crítico más destacado dentro de su partido conservador, Jens Spahn, siempre que salga adelante una coalición con los sociademócratas (SPD), dijo una fuente del partido a Reuters el domingo.
Merkel, que está poniendo sus esperanzas en un cuarto mandato en asegurar una "gran coalición" con el SPD, tiene previsto anunciar el domingo su opción de seis ministros para el gabinete de entre los cristiano demócratas (CDU).
Aunque los líderes están de acuerdo en un acuerdo de coalición, todavía necesitan la bendición de sus partidos y la aprobación de los miembros del SPD está lejos de ser cierta.
Darle a Spahn el puesto de ministro de Sanidad es una señal de que Merkel está ansiosa por calmar a sus críticos que quieren sangre nueva y una nueva dirección. Spahn ha criticado duramente la política de puertas abiertas a la inmigración de Merkel y es visto como un defensor del ala derecha del partido.
Spahn, de 37 años, ha sido viceministro de Finanzas desde 2015 y antes de eso fue el experto en Sanidad del partido.
Aunque la designación refleja su debilidad, algunos analistas dicen que también es un movimiento astuto para incluir a su principal crítico en el gabinete para mantenerlo a bordo.
La fuente del partido confirmó una información del semanario Bild am Sonntag que afirmaba que Merkel, como se esperaba, decidió mantener a su tradicional aliado Peter Altmaier a cargo del Ministerio de Economía.
El diario también dijo que Ursula von der Leyen, que fuera señalada como posible sucesora de Merkel, seguiría como ministra de Defensa. Agregó que Julia Kloeckner, alto cargo del CDU, se encargará del Ministerio de Agricultura.
La fuente del partido no confirmó ni desmintió esos puestos.
Después de 12 años como canciller y casi 18 años como jefa de la CDU, la autoridad de Merkel está comenzando a menguar.
Su bloque conservador, que incluye a la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), obtuvo su peor resultado desde 1949 en las elecciones de septiembre, perdiendo apoyos en favor de la formación de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD).
En otro revés, no consiguó ponerse de acuerdo sobre un acuerdo de coalición con dos partidos más pequeños, lo que le obligó a a recurrir a los socialdemócratas, con quienes había compartido el poder entre 2013 y 2017.
Si los miembros votan "no" al acuerdo, el resultado más probable será unas nuevas elecciones o posiblemente un gobierno en minoría.
(Información de Madeline Chambers; Traducido por Raquel Castillo en Madrid)