Luxemburgo, 13 jun (EFE).- Los ministros de Pesca de la Unión Europea (UE) llegaron a un acuerdo en la madrugada de hoy sobre la reforma de la Política Pesquera Comunitaria (PPC) que aplaza los objetivos para la recuperación de las existencias pesqueras, para limitar el impacto sobre el sector.
El acuerdo es solo "parcial", ya que la reforma pesquera debe ser pactada entre el Consejo y el Parlamento Europeo, que comenzará a votarla el próximo octubre.
Frente a la radicalidad de la propuesta que la Comisión Europea presentó el pasado julio, que daba un escaso margen temporal para la aplicación de los nuevos objetivos, los titulares de Pesca respaldaron una reforma más moderada, a partir de un texto de compromiso de la presidencia danesa de turno de la UE.
"Los Estados miembros han dado un paso adelante para una política común de pesca radicalmente nueva", dijo en rueda de prensa al término de la reunión la ministra danesa de Pesca, Mette Gjerskov.
Por su parte, la comisaria europea de Pesca, Maria Damanaki, indicó que el acuerdo es "un logro" que supone "un primer paso" en un proceso en el que "aún queda mucho trabajo por hacer".
La comisaria reconoció que la propuesta de la Comisión era más ambiciosa que la que salió adelante, pero adelantó que seguirá insistiendo en favor de una pesca más sostenible y confió en que la Eurocámara consiga endurecer las condiciones medioambientales de la PPC.
El texto respaldado, relativo al reglamento que regirá la PPC a partir de 2014, fija como prioridad lograr los rendimientos máximos sostenibles de las existencias pesqueras en 2015, pero permite aplazar el objetivo cinco años, hasta 2020, cuando su consecución no sea posible con anterioridad.
Sobre los descartes (capturas no deseadas que se devuelven al mar por su bajo valor comercial), el asunto más conflictivo y que concentró la mayor parte de las 18 horas de discusiones entre los ministros, el Consejo acordó "poner punto y final" a la práctica "pesquería por pesquería y con un enfoque temporal claro", indicó la ministra danesa.
En las discusiones del Consejo se formaron dos grupos: el de los países que pedían aplazar unos años la eliminación de los descartes, especialmente en el caso de las pesquerías mixtas (España, Francia, Italia, Irlanda y Bélgica) y los que consideraban que había que ponerla en marcha cuanto antes y en todas las situaciones (Suecia, Reino Unido y Alemania).
La reforma plantea además la creación de un mercado de cuotas de pesca transferibles como medida para redimensionar la capacidad de la flota.
También se llegó a un acuerdo en el Consejo sobre el futuro de la regulación del mercado de los productos del mar y de la acuicultura.
Con motivo de la reunión, un grupo de seis Organizaciones No Gubernamentales (ONG) alertó en un comunicado de que el acuerdo propuesto por Dinamarca rebajaba el nivel de ambición y retrasaba los objetivos, al fijar un enfoque progresivo para frenar la sobrepesca durante la próxima década.
"Aunque los ministros saben que hacen falta planes de acción para reducir los excesos en la capacidad pesquera, el acuerdo no incluye plazos ni medidas específicas", lamentaba el comunicado.
Las organizaciones, Birlife Europe, Greenpeace, OCEAN2012, Oceana, Seas at Risk y WWF, pedían a los ministros el rechazo del texto y urgían al Parlamento Europeo a enmendar la decisión, en caso de ser aprobada.
Según un informe publicado recientemente por la Comisión Europea, el 80 % de los recursos pesqueros en el Mediterráneo están sobreexplotados, mientras que en las aguas del Atlántico, donde ha habido una mejora en la última década, el porcentaje es algo inferior al 50 %. EFE