Madrid, 16 ene (.).- El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha destacado a los inversores extranjeros que España mantendrá este año un crecimiento superior al 2,5 %, con un patrón más equilibrado y con mayor protagonismo de la inversión en energías renovables y alta tecnología frente al turismo.
"Eso es España hoy, no es solo turismo", ha remarcado este jueves durante una almuerzo coloquio en el marco del Spain Investors Day, un foro que pone la economía española en el escaparate de la inversión internacional y que esta tarde clausura el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El ministro ha incidido también en la compatibilidad de ese crecimiento con la responsabilidad fiscal y con la consecución de derechos sociales, en un momento en que el mercado laboral arroja cifras récord de ocupación.
A corto plazo ha situado como principal reto la recuperación de las zonas afectadas por la dana de Valencia, a la que se ha destinado un plan de 16.600 millones de euros, de los que 1.080 millones ya han llegado a 84.000 afectados a través de las indemnizaciones del Consorcio de Compensación de Seguros.
Frente al liderazgo de España en el avance económico de la eurozona, Cuerpo ha situado la falta de acceso a la vivienda entre los tres primeros desafíos que afronta el país a medio plazo.
El problema de la vivienda supone un cuello de botella que cree que desaparecerá no solo con políticas públicas, sino también de la mano del sector privado, además de tratarse de una cuestión en la que está implicada la falta de movilidad laboral.
Entre los retos de futuro ha hablado asimismo de lo que ha llamado "el componente social", que ha cifrado en la necesidad de aumentar la confianza de la ciudadanía teniendo en cuenta que los hogares valoran mejor su economía doméstica que la evolución de la situación económica en general.
Por encima de estos factores ha puesto el "difícil" escenario internacional, en el que cree que España debe estar alineada con una Europa que ha de "ocupar su lugar" protagonista, manteniéndose "abierta, pero no ingenua".
En este contexto se enmarca la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, sobre cuyas posibles políticas no ha querido pronunciarse hasta que no ocurran, aunque ha destacado que se trata de un país socio con el que hay mucho margen de mejora tanto en comercio como en inversión.