El Banco de Inglaterra (BoE) anunció una reducción del tipo de interés oficial al 4,75%, marcando el segundo recorte en su ciclo actual de flexibilización monetaria. Esta medida refleja un enfoque prudente en la trayectoria de los tipos, especialmente teniendo en cuenta el reciente estímulo fiscal.
Según el Comité de Política Monetaria (MPC), se prevé que las medidas políticas del Presupuesto de Otoño impulsen el PIB en un 0,75% en el plazo de un año y contribuyan con un 0,5% adicional al Índice de Precios al Consumidor (IPC) en su punto máximo.
El MPC ha revisado al alza sus previsiones de crecimiento e IPC a corto plazo, indicando que ya no existe capacidad excedente en la economía británica para el próximo año.
Asimismo, el MPC ha expresado su preferencia por una flexibilización gradual si la evolución económica se ajusta a sus expectativas, estableciendo un umbral más elevado para posibles recortes adicionales de tipos en diciembre.
No obstante, el MPC dejó abierta una estrecha posibilidad de reducción de tipos en diciembre, condicionada a desarrollos negativos significativos en los precios y salarios domésticos que sugieran un retorno más rápido de la inflación a la tasa objetivo.
Los próximos informes sobre crecimiento, inflación y mercado laboral serán fundamentales para evaluar la validez de las previsiones del BoE y podrían influir en el proceso de toma de decisiones del MPC de cara a la próxima reunión en diciembre.
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