El Banco Popular de China ha recortado los tipos de interés y ha rebajado el coeficiente de caja de los bancos. Ambas cosas, por segunda vez en dos meses. El banco central busca así dar respaldo a una economía que flojea y a un mercado bursátil que ha sido el epicentro de un terremoto en todos los parqués del mundo.
Los principales índices chinos han caído este martes más de un 7%, marcando nuevos mínimos desde diciembre. Llueve sobre mojado: ayer ya se dejaron más de un 8%.
Aunque la decisión del banco central chino ha llegado con los parqués del país ya cerrados, los europeos subían con fuerza tras conocerla, y también los futuros de Wall Street.