Tokio, 30 abr (EFE).- El Banco de Japón (BoJ) recortó hoy su previsión de subida de precios para el actual año fiscal, que termina el próximo marzo, hasta un 0,8 por ciento interanual, por lo que retrasó su objetivo de lograr una inflación del 2 por ciento en 2015.
El informe semestral de perspectiva económica del banco central presentado hoy rebaja en dos décimas la estimación del 1 por ciento del IPC interanual que había hecho la entidad en enero.
El banco emisor mantiene su objetivo inflacionario del 2 por ciento, que se había planteado lograr en 2015, pero lo retrasa ahora hasta la segunda mitad del próximo ejercicio, que en Japón arranca en abril de 2016.
El BoJ revisó además su previsión de crecimiento para la tercera economía del mundo para el ejercicio fiscal 2016, que había marcado anteriormente en un 1,6 por ciento, y la rebaja hasta el 1,5 por ciento.
Estas modificaciones de sus estimaciones vienen motivadas por el "previo y posterior parón en la demanda", principal motor de la economía nipona, causado por la subida del impuesto sobre el consumo (la primera en 17 años) que entró en vigor en abril de 2014.
A esto se une además la caída de precios del crudo, que está teniendo una presión deflacionaria sobre el país asiático y dificulta su objetivo de superar un ciclo de 15 años de crecimiento negativo en los precios.
En este sentido, el informe del BoJ apunta que el objetivo inflacionario se cumplirá siempre dependiendo de los precios que registre el petróleo.
Pese a todo ello, el banco central estima que Japón seguirá "creciendo a un ritmo por encima de su potencial" durante el actual ejercicio y el siguiente.
Previamente a la presentación del informe, la junta de política monetaria del BoJ aprobó, con solo un voto en contra del total de nueve miembros, mantener el programa de compra masiva de deuda pública y activos de riesgo que inició en abril de 2013.
De este modo, la entidad seguirá adelante con las "operaciones para incrementar la base monetaria a un ritmo anual en unos 80 billones de yenes (60.530 millones de .256 millones de dólares) con el objetivo de terminar con el ciclo de casi dos décadas de deflación.