Madrid, 25 oct (.).- El nuevo repunte del déficit del Estado sitúa el desfase acumulado hasta septiembre en 28.531 millones de euros, equivalente al 2,56 % del producto interior bruto (PIB), cifra que roza la previsión del 2,6 % del PIB para el conjunto del ejercicio remitida a Bruselas.
De acuerdo a los datos distribuidos hoy por el Ministerio de Hacienda, el déficit estatal aumentó un 20 % con respecto al mismo periodo de 2015, algo que achaca a la liquidación del sistema de financiación de las comunidades autónomas correspondiente a 2014 realizado en julio, que fue superior al del ejercicio anterior.
Este elemento, que ya impactó en la ejecución presupuestaria del mes pasado, tiene el efecto contrario en las cifras de las comunidades autónomas, que hasta agosto (los últimos datos disponibles, ya que se publican con un desfase de un mes con respecto a los del Estado) redujeron un 90,6 % su déficit, hasta los 802 millones, equivalentes al 0,07 % del PIB.
Los datos hasta agosto reflejan que siete comunidades autónomas registraron superávit: Andalucía, Asturias, Baleares, Canarias, Galicia, La Rioja y el País Vasco.
Mientras tanto, la Seguridad Social se anotó un déficit -expresado en términos de caja y no de contabilidad nacional como el del Estado- de 6.151 millones hasta septiembre, lo que supone un 10,5 % más y un 0,55 % del PIB.
El déficit de la Seguridad Social en términos de contabilidad nacional correspondiente a agosto (el último disponible) se situó en 6.664 millones, lo que equivale al 0,6 % del PIB.
De esta manera, el déficit consolidado de las administraciones públicas, excluidas las corporaciones locales -cuyos datos todavía no se han publicado-, hasta agosto, se situó en el 3,3 % del PIB, por debajo del objetivo de todo este ejercicio consensuado con Bruselas, del 4,6 % del PIB.
Este objetivo global no se ha desglosado aún por administraciones a la espera de que se forme Gobierno o de que culmine la reforma de la Ley de Estabilidad que permitiría aprobar esta distribución de objetivos a un Ejecutivo en funciones.
Sin embargo, el proyecto presupuestario remitido por el Gobierno a la Comisión Europea prevé que el Estado termine 2016 con un déficit del 2,6 %; la Seguridad Social, del 1,7 %, y las administraciones territoriales, del 0,3 %, lo que implica que si las comunidades autónomas cumplen con el 0,7 % previsto, las entidades locales tendrán un superávit del 0,4 %.
Los datos de déficit del Estado hasta septiembre reflejan, además del impacto de la liquidación del sistema de financiación de las comunidades autónomas, una caída tanto de los ingresos como de los gastos en ese periodo.
En materia de ingresos -126.093 millones, un 4,4 % menos-, la ejecución presupuestaria observa un descenso de la recaudación por impuestos, especialmente la del IRPF, que cae un 7,7 %, y la del Impuesto de Sociedades, que desciende un 24,9 %.
La recaudación por Impuesto de Sociedades se ha visto lastrada por el descenso en los ingresos de pagos fraccionados originado por la desaparición en 2016 de las medidas de ejercicios anteriores, recuperada por el Gobierno a finales de septiembre con el objetivo de ingresar 8.300 millones adicionales que contribuyan a cumplir el déficit.
Así, la recaudación por este concepto empezará previsiblemente a recuperarse en octubre, ya que en ese mes las grandes empresas han efectuado el primer pago conforme a la nueva normativa.
En cuanto a los gastos, cerraron septiembre en 154.624 millones, un 0,6 % menos, en parte por las menores transferencias al Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) para financiar las prestaciones por desempleo, algo que Hacienda justifica por "la favorable evolución del mercado laboral".
También bajó el gasto en intereses, consumos intermedios y aportaciones para financiar el Presupuesto de la Unión Europea, aunque aumentó la remuneración de asalariados por la subida de la retribución de empleados públicos y la devolución de la mitad de la paga extra de diciembre eliminada en 2012.