MADRID (Reuters) - El ministro español de Hacienda dijo el lunes que su Gobierno en minoría confía en lograr los apoyos necesarios de otros grupos políticos para sacar adelante los presupuestos de este año en el Congreso, lo que permitiría apuntalar la recuperación económica y enviaría un mensaje de estabilidad a los mercados financieros.
"En la medida en que se acercan las fechas estamos cada vez más convencidos de que tendremos los apoyos parlamentarios necesarios", dijo Cristóbal Montoro en comentarios a periodistas antes de participar en una conferencia sobre las cuentas públicas en Madrid.
Montoro tiene previsto llevar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2017 al Consejo de Ministros este viernes para su posterior remisión al Congreso de los Diputados, donde el Grupo Popular cuenta con sólo 134 de los 350 representantes.
El ministro de Hacienda hizo hincapié en que la aprobación parlamentaria de las cuentas públicas demostraría que "España tiene una estabilidad política suficiente para que continúe la recuperación económica y la creación de empleo".
España ha recuperado en los últimos tres ejercicios alrededor de la mitad de los más de 3 millones de empleos destruido en los seis años de crisis, pero aún está lejos de los más de 20 millones de ocupados que tenía a mediados de 2008.
Montoro reiteró que su gobierno prevé alcanzar este umbral de empleo a finales de 2019.
"¿Qué partido se atrevería a oponerse a la recuperación económica y la creación de empleo?", se preguntó el ministro de Hacienda en el comienzo de una semana clave para sacar adelante los presupuestos del año en curso y sentar las bases para un nuevo techo de gasto público en 2018.
En este contexto, Montoro insistió también en la necesidad de reducir el endeudamiento del sector público, que rozó el 100 por cien del PIB en 2016, y en alinear el déficit público con los objetivos marcados por Bruselas.
A falta de conocerse los datos oficiales de 2016, Montoro reiteró que España habría cumplido con creces el objetivo de reducir el déficit presupuestario al 4,6 por ciento del PIB.
"El déficit lo hemos bajado algunas décimas por debajo del 4,6 por ciento y si descontamos lo que llamamos las ayudas financieras se situaría en un 4,33 por ciento", dijo el ministro para añadir que la consolidación fiscal se lograría sin recortes del gasto social y sin ninguna subida del IVA, una medida reiteradamente planteada por el Fondo Monetario Internacional.
El Gobierno mantiene actualmente conversaciones para conseguir los respaldos parlamentarios en una votación en el Congreso de los Diputados que se prevé muy ajustada.
A mediados de marzo el diputado y portavoz de Nueva Canarias en el Congreso, Pedro Quevedo, anunció su disposición para negociar con el Ejecutivo un apoyo que podría ser clave ante el rechazo del PSOE, principal fuerza de la oposición.
Un eventual acuerdo con el diputado de Nueva Canarias se sumaría a los posibles pactos del PP con Ciudadanos, Partido Nacionalista Vasco y Coalición Canaria.
Si prosperasen todas estas negociaciones, los presupuestos generales del Estado alcanzarían los 176 votos, que marcan la mayoría absoluta en una cámara con 350 representantes.
Este fin de semana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, señaló que las conversaciones con otros grupos políticos podrían continuar más allá de la aprobación en el Consejo del viernes.
"El objetivo es tener presupuestos, es bueno para España y es un mensaje de estabilidad política que creo que en este momento es lo único que puede perturbar la buena marcha de la economía", dijo.