Asunción, 1 ago (.).- El Gobierno paraguayo acordó este jueves un convenio con una empresa naviera que prevé el dragado de puntos críticos de piedra del río Paraguay para mejorar su navegabilidad y aumentar al triple el volumen de cargas que el país transporta a través de la Hidrovía Paraguay-Paraná.
"Firmamos un acuerdo crucial que permitirá una navegación más eficiente en nuestros ríos, reduciendo los costos logísticos y triplicando los volúmenes de carga de nuestra hidrovía", señaló el presidente de Paraguay, Santiago Peña, en la red social X.
El mandatario se refirió a la firma del Convenio de Cooperación Técnica Público-Privado entre el Ministerio de Industria y Comercio, la Administración Nacional de Navegación y Puertos y la empresa Transbarge Navegación S.A.
El ministro de Industria, Javier Giménez, dijo en una conferencia de prensa que el proyecto consiste en remover "13 puntos de puntas de piedra" del río Paraguay, "de una forma técnica", sin producir un daño ambiental, todo a cargo de la empresa privada.
"Se estima que las obras del rompimiento de estos 13 pasos difíciles van a orillar los 40 o 50 millones de dólares, sin que se exija ningún cobro de peaje", adelantó.
La obra, que durará entre seis y ocho meses, tendrá "un altísimo impacto" en la "eficiencia logística" que mejorará las exportaciones de productos paraguayos, además de la importación, aseguró el ministro.
El descenso del nivel del río Paraguay hace que las piedras se vuelven obstáculos para navegar, lo que encarece el flete, que según Giménez, bordea el 30 % del costo total de exportación.
"Al bajar el costo logístico y ser más eficiente vamos a tener productos en nuestras góndolas a menor precio", previó Giménez como la principal ventaja del proyecto que, a su juicio, mejorará la navegabilidad en esta parte de la Hidrovía Paraguay-Paraná, canal clave para la salida de buques de carga hacia el Atlántico.
Según el ministro, la obra permitirá una navegación "más competitiva" y tendrá un impacto regional pues "aumentará el volumen de carga de todos los países que dependen de la hidrovía", como Bolivia, Brasil, Uruguay y Argentina.