París, 30 jul (.).- El producto interior bruto (PIB) francés creció un 0,3 % en el segundo trimestre, al mismo ritmo que en el primero, y eso esencialmente gracias al comercio exterior y en menor medida a la inversión.
El Instituto Nacional de Estadística (INSEE) explicó este martes en un comunicado que el comercio exterior aportó dos décimas al crecimiento del PIB en el segundo trimestre y la demanda interior contribuyó con otra décima.
En la progresión de la demanda interna participó de forma significativa la inversión, que subió un 0,1 % entre abril y junio, después de un descenso del 0,4 % en los tres primeros meses del año.
También subieron los gastos de las administraciones públicas un 0,3 %, a un ritmo inferior al 0,6 % del primer trimestre.
Por lo que respecta al comercio exterior, las importaciones se mantuvieron estables en el segundo trimestre, mientras las exportaciones aumentaron un 0,6 %.
La otra cara de la moneda fue el consumo de los particulares, que se mantuvo estancado entre abril y junio, tras un retroceso del 0,1 % entre enero y marzo.
La producción avanzó un 0,5 % en el segundo trimestre, con notables diferencias entre los sectores. La construcción sufrió un descenso por cuarto trimestre consecutivo (-0,7 %, después del -1,1 % en los tres primeros meses del año).
De cara al tercer trimestre, el INSEE había anticipado a comienzos de julio un incremento del 0,5 %, y eso en buena medida por un efecto positivo de los Juegos Olímpicos de París, que deberían aportar tres décimas.
Para el conjunto del año, el instituto estadístico esperaba un alza del 1,1 %, como en 2023.