Quito, 19 sep (.).- El PIB) per cápita de Ecuador podría verse reducido hasta en cuatro puntos porcentuales para 2050 si no toma acciones contras las consecuencias del cambio climático y de las amenazas naturales, en el orden de unos 3.700 millones de dólares al año, según un informe del Banco Mundial (BM) presentado este jueves en Quito.
El 'Informe sobre Clima y Desarrollo (CCDR por sus siglas en inglés)' para Ecuador fue elaborado con el objetivo de tener un diagnóstico que integre la acción climática con el desarrollo económico del país.
Para ello se busca identificar los principales caminos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y las vulnerabilidades climáticas, y se indican los costos y las dificultades de esta tarea, así como sus beneficios y oportunidades.
El director del Banco Mundial para Bolivia, Chile, Ecuador y Perú, Issam Abousleiman, explicó que, entre 2025 y 2050, Ecuador necesitará en promedio 3.700 millones de dólares anuales (equivalentes al 3,5 % del PIB) en inversiones para la mitigación y adaptación climática.
Estas acciones, "combinadas con reformas institucionales y estructurales críticas, podrían desbloquear la productividad de Ecuador y fortalecer su resistencia a los choques económicos y ambientales”, aseguró Abousleiman.
De su lado, la viceministra de Ambiente de Ecuador, Cristina Recalde, declaró que el informe no solo resalta los retos climáticos que enfrenta el país, sino también brinda oportunidades y medidas concretas para avanzar hacia un desarrollo sostenible.
Juan José Miranda, economista senior del Banco Mundial, presentó el informe que recoge algunas de las medidas que contribuirían a un crecimiento resiliente y bajo en emisiones de Ecuador.
Miranda explicó que las condiciones geográficas, climáticas y socioeconómicas del país lo hacen especialmente vulnerable a amenazas climáticas como la sequía o las inundaciones, que se verán intensificadas con el cambio climático.
Los mayores impactos de este escenario se sentirán, según las investigaciones, en las infraestructuras de transporte, la interrupción en la actividad económica, así como en las pérdidas de la producción agrícola, lo que podría reducir el PIB per cápita en aproximadamente cuatro puntos porcentuales para 2050.
Otras de las presiones que mencionó el experto fue una tendencia mundial a la descarbonización que afectará a la demanda y precio del petróleo, uno de los principales pilares de la economía ecuatoriana gracias a sus exportaciones, por lo que el país necesitaría “diversificar su economía y adaptarse a las nuevas demandas globales”.