Bruselas, 18 dic (.).- España dejó de ingresar 4.443 millones de euros en 2022 por fraude, evasión o errores de cálculo en la recaudación del IVA, lo que supone un 4,6 % de lo que potencialmente podría haber recaudado por este impuesto, según el informe sobre la brecha del IVA publicado este miércoles por la Comisión Europea.
El resultado español es mejor que el promedio de la Unión Europea, cuyos países perdieron de media un 6 % de la recaudación por el impuesto sobre el valor añadido (IVA) y dejaron de ingresar, en conjunto, más de 89.000 millones de euros por estos motivos.
En España, la brecha del IVA aumentó en 2022 con respecto a 2021, cuando las pérdidas fueron de 3.524 millones de euros (4,1 % de la recaudación potencial), con lo que puso fin a tres años de descensos consecutivos.
Sin embargo, en comparación con 2018, ha logrado reducirla en 1,9 puntos porcentuales, de acuerdo con el informe del Ejecutivo comunitario.
En el mismo, Bruselas recuerda que la recaudación por IVA en España creció un 12,3 % en 2022, hasta los 92.344 millones de euros, impulsada por el aumento del PIB, del consumo de los hogares y de la inversión, que repuntaron "fuertemente" tras la pandemia en 2021 y 2022, años en los que la brecha en la recaudación del impuesto "se mantuvo baja".
Bruselas señala que a la mayor eficiencia de la recaudación contribuyó también la expansión de las ventas del comercio electrónico, que pasaron de representar el 17,1 % de la facturación de las empresas en 2018 al 19,9 % en 2022, puesto que reducen las transacciones con efectivo y mejoran el cumplimiento gracias a una mejor auditoría.
En comparación con el resto de Estados de la UE, España registró la décima menor brecha del IVA en 2022, por detrás de Chipre, que recaudó incluso más de lo que potencialmente le correspondía (-0,67 %), Portugal (que dejó de ingresar un 1,30 %), Irlanda (1,17 %), Hungría (2,31 %), Austria (3 %), Luxemburgo (3,70 %), República Checa (4,23 %), Alemania (4,23 %) y Estonia (4,40 %).
Por el contrario, los Estados con mayores brechas fueron Rumanía, que perdió casi un tercio de su recaudación potencial (30,59 %), y Malta (25,89 %), seguidas de Eslovaquia y Lituania (ambas 14,62 %), Grecia (13,71 %), Croacia (12,03 %), Bélgica (11,04 %) e Italia (10,55 %), que dejaron de ingresar uno de cada diez euros previstos por IVA.
En total, la UE perdió 89.283 millones de euros en 2022, por encima de los 75.941 de 2021, pero lejos del agujero de 121.000 millones de euros que registró en 2018.
"En 2022, el déficit del IVA se elevó a casi 90.000 millones de euros para los 27 Estados miembros. Es una suma importante que habría podido ser destinada a financiar bienes y servicios públicos esenciales como escuelas, hospitales e infraestructuras", dijo el comisario europeo responsable de Fiscalidad, el holandés Wopke Hoekstra, en un comunicado.
No obstante, la Comisión Europea celebró la reducción de este agujero en los últimos años y subrayó que las medidas políticas específicas han "supuesto una diferencia significativa" a la hora de mejorar los niveles de recaudación, en particular las ligadas a la digitalización de los sistemas fiscales, la declaración de transacciones en tiempo real y las facturas electrónicas.