PARÍS (Reuters) - El Gobierno francés anunciará pronto medidas para impulsar la construcción residencial y aprobará reducciones fiscales para los hogares con rentas bajas, dijo el martes un secretario de Estado, mientras el presidente François Hollande trata de sacar la economía del estancamiento.
La vivienda se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para el Gobierno, con las nuevas construcciones en sus cifras más bajas en 16 años - un serio obstáculo para la economía que los promotores achacan en parte a las leyes que entraron en vigor este año y que establecen límites en los alquileres en las ciudades de más de 50.000 habitantes.
La rebaja fiscal se esperaba desde que el Gobierno dijo que encontraría un recambio para las reducciones de impuestos a los salarios que anuló el principal tribunal del país este mismo mes.
"Pronto se anunciarán medidas urgentes", dijo el secretario de Estado para Asuntos Europeos, Harlem Desir, en la cadena BFM TV. "En los próximos días, propondremos nuevas medidas de rebajas fiscales para los hogares con rentas bajas".
Desir no quiso aclarar si alguna de estas medidas se anunciarán el miércoles, en el primer consejo de ministros tras el parón veraniego. Dijo que se están barajando diversas posibilidades, entre ellas el aumento de las ayudas.
"No podemos permitir que la vivienda permanezca encallada", dijo, y afirmó que el sector es una prioridad para poner en marcha la economía y crear empleo.
Francia recortó la semana pasada sus previsiones de crecimiento tanto para 2014 como para 2015, y ha dicho que incumplirá sus objetivos de déficit público este año, después de que los datos mostraran que la economía no creció por segundo trimestre consecutivo.
Desir también reiteró los llamamientos desde su país para que sus socios en la Unión Europea den a Francia más manga ancha a la hora de cumplir los objetivos de déficit público, y para que la UE y el Banco Central Europeo hagan más para impulsar el crecimiento.
"El BCE debe tener una política más atrevida", dijo, repitiendo los llamamientos para que haya un "importante" plan de inversiones en Europa. Pidió más detalles sobre el compromiso del próximo presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, de crear un programa de inversiones público-privado dotado con 300.000 millones de euros en los próximos tres años.