MADRID (Reuters) - La Agencia Tributaria anunció el lunes que en el ejercicio 2015 recaudó 15.664 millones de euros en la lucha contra el fraude, un 27,2 por ciento más que el año anterior, gracias a inspecciones a grandes contribuyentes, esfuerzos para destapar la economía sumergida y el cobro efectivo de deudas tributarias.
"Estos resultados se consiguen gracias al esfuerzo y al resultado de todos los funcionarios de la Agencia Tributaria que aportan prácticamente el 1,5 por ciento del PIB a los ingresos que financian los servicios públicos", explicó en rueda de prensa el director general de la Agencia Tributaria, Santiago Menéndez.
Parte de lo recaudado proviene de expedientes singulares, aquellos que por sus características es muy probable que no se repitan en ejercicios posteriores y que han supuesto un total de 2.700 millones de euros.
Menéndez no aportó ningún detalle más sobre estos expedientes, aunque afirmó que incluía este dato en un ejercicio de transparencia.
Entre las acciones destacadas por la agencia están el aumento de esfuerzos centrados en la economía digital y las actuaciones presenciales de verificación sobre economía sumergida, que según diversas estimaciones supone en torno al 20 por ciento del PIB.
En la lucha contra la economía sumergida, las actuaciones se han centrado especialmente en el control de alquilares no declarados, que han crecido en el último ejercicio en gran medida por las habitaciones de alquiler a través de Internet para turistas, según reconoció Menéndez.
Precisamente Internet será uno de los focos en los que se centrará la Agencia Tributaria en 2016. Según el nuevo plan presentado, Hacienda potenciará la búsqueda del fraude en la red además de la investigación de las rentas en el exterior a través de la información recibida por otros estados miembros de la Unión Europea.
La Agencia Tributaria, que en 2015 publicó un listado con las empresas y personas físicas que deben más de un millón de euros al erario público, dijo que no ha hecho ningún estudio sobre la influencia que esta revelación ha tenido en la lucha contra el fraude, aunque sí que se ha detectado ciertos cambios.
"Hemos notado un cambio de actitud en algunos contribuyentes. El riesgo reputacional y de prestigio sí que son importante", dijo Menéndez sobre una lista que incluye un total de 4.855 deudores por un importe global de 15.600 millones de euros.
Ante la cuestión de que si una mayor recaudación en la lucha contra el fraude indica que también ha aumentado dicho fraude, el director general no quiso entrar en valoraciones pero sí señaló que las actuaciones llevadas a cabo son sobre los ejercicios que no han prescrito, que precisamente son los años más duros de la crisis.