París, 4 oct (EFE).- Francia y Bélgica se comprometieron hoy a aportar su garantía a las financiaciones del banco franco-belga Dexia, cuyas acciones caían un 33 % en la Bolsa de Bruselas en los primeros veinte minutos de la sesión de hoy después de que la entidad sugiriera que podría desmantelar parte de sus activos.
"En el marco de la reestructuración de Dexia, los estados belga y francés, junto con los Bancos Centrales, tomarán todas las medidas para garantizar la seguridad de los impositores y acreedores", señala un comunicado del Ministerio galo de Economía.
El escueto texto, firmado por el ministro francés, François Baroin, y el belga, Didier Reynders, apunta que ambos países "se comprometen con ese objetivo a aportar su garantía a las financiaciones" de esa entidad.
Los títulos de Dexia ya habían caído un 10,16 % en la sesión de ayer, a cuyo cierre el consejo de administración de la entidad celebró una reunión de emergencia que se prolongó durante seis horas y tras la que se facilitó un comunicado en el que la dirección del banco apuntaba al desmantelamiento del mismo.
La agencia de calificación Moody's amenazó ayer con revisar a la baja la nota de las tres principales entidades operativas de Dexia (Dexia Banca Bélgica, Dexia Crédito Local y Dexia Banca Internacional en Luxemburgo) por el nuevo deterioro en la liquidez del grupo.
El comunicado de hoy llega después de que este lunes Reynders destacara que tanto Francia como Bélgica harían todo lo posible para no dejar caer a Dexia, asegurando que los respectivos gobiernos "están detrás de sus bancos".
Los Ejecutivos de Francia, Bélgica y Luxemburgo ya inyectaron 6.400 millones de euros en Dexia durante la crisis financiera de 2008, cuando se puso en marcha un amplio proceso de reestructuración de la entidad. EFE