Arantxa Iñiguez
Fráncfort (Alemania), 11 dic (EFE).- La baja demanda de los bancos de préstamos a cuatro años a un tipo de interés fijo del 0,15 % hace pensar que el Banco Central Europeo (BCE) aplicará una expansión cuantitativa, compras de grandes cantidades de deuda soberana.
El BCE prestó hoy 129.840 millones de euros con estas condiciones en la segunda subasta de este tipo para impulsar el crédito a la economía real.
La entidad monetaria adjudicó el efectivo a 306 bancos de la zona del euro con la condición de que presten a las empresas y hogares.
La cantidad ha sido pequeña e indica que tienen suficiente liquidez y puede reforzar las expectativas de que el BCE decidirá llevar a cabo una expansión cuantitativa, compras de deuda soberana en grandes cantidades, según los analistas del banco italiano UniCredit.
El volumen de liquidez adjudicado se situó dentro de las expectativas de los analistas, que habían pronosticado que los bancos solicitarían entre 110.000 y 150.000 millones de euros.
"Esto puede compensar parte de la presión en la periferia que causa la inestabilidad política griega", añade UniCredit.
El volumen máximo que los bancos de la zona del euro podían tomar prestado en las dos operaciones era de 400.000 millones de euros.
El BCE prestó a mediados de septiembre 82.601 millones de euros brutos, también a cuatro años y a un tipo de interés fijo también del 0,15 %, en la que fue la primera de las dos operaciones de financiación a más largo plazo.
En total los bancos han pedido 212.441 millones de euros brutos en liquidez a cuatro años, algo más de la mitad de lo que podían solicitar.
El BCE pretende con las medidas no convencionales de política monetaria que su balance vuelva al tamaño que tenía a principios de 2012, cuando era un billón de euros superior al actual.
La entidad monetaria europea también ha comenzado a adquirir bonos garantizados y bonos de titulización de activos.
Hasta ahora el BCE ha adquirido bonos garantizados, en España conocidos como cédulas, por valor de 20.927 millones de euros, y bonos de titulización por valor de 601 millones de euros.
Parece que el BCE tendrá que adquirir grandes cantidades de deuda soberana para aumentar su balance en un billón de euros.
Los bancos comerciales deberán devolver los préstamos al BCE el 26 de septiembre de 2018, pero si no prestan a las empresas y hogares tendrán que hacerlo dos años antes.
El miembro francés del comité ejecutivo del BCE, Benoît Coeuré, responsable de operaciones de mercado, dijo que la cantidad solicitada en esta segunda operación se situó dentro de las expectativas y cálculos de los mercados y del BCE.
"Vemos que esta herramienta condicionada ha sido bien recibida por nuestras entidades de contrapartida (los bancos)", apostilló Coeuré.
Añadió que en las dos operaciones juntas los bancos que han participado usaron de media un 80 % de lo que podían pedir.
"También vemos un aumento del número de participantes y una distribución equilibrada de la liquidez en los países, mientras los bancos hicieron un uso pragmático de sus opciones de agrupamiento", según Coeuré.
El BCE observó que la primera de estas dos operaciones a cuatro años, la de septiembre, contribuyó a mejorar el acceso de los bancos a la liquidez a largo plazo.
"Junto con nuestras otras medidas, crean las condiciones que estimulan el crecimiento del crédito a la economía real y reducen la fragmentación financiera en línea con nuestros objetivos de política" monetaria, dijo el banquero central francés.
En estas dos operaciones los bancos podían pedir prestado un máximo del 7 % de sus préstamos a las empresas y hogares, excluidas las hipotecas.
Los bancos alemanes pudieron pedir un máximo de 95.000 millones de euros, los franceses de 77.000 millones de euros, los italianos de 75.000 millones de euros y los españoles de 54.000 millones de euros.
El Banco Santander y el BBVA han pedido en las dos subastas 13.400 millones de euros en total.
El Banco Popular ha solicitado en las dos operaciones 5.694 millones de euros a los que tenía derecho y Bankia, 2.775 millones de euros.