María Tejero Martín
Bruselas, 6 nov (.).- El ministro español de Economía, Luis de Guindos, se volverá a reunir mañana con sus colegas del Eurogrupo, al que acude con la tarea pendiente de enviar un presupuesto completo a Bruselas que cumpla con los objetivos de reducción del déficit.
Los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro también tratarán la situación en la que se encuentran las conversaciones entre Grecia y sus socios respecto al cumplimiento de las condiciones asociadas a su tercer rescate financiero, tras el reciente inicio de la segunda revisión del programa.
De Guindos acude a la cita tras haber recibido de nuevo la confianza de Mariano Rajoy por su trabajo en los cinco años precedentes, en los que ha vivido uno de los periodos más duros de la crisis, con el rescate concedido a España para sanear el sector bancario.
La necesidad de reequilibrar las cuentas públicas españolas y de reducir el déficit público ha sido una constante en estos años, un proceso que España aún debe culminar, tras haber eludido una multa el pasado julio por incumplir sus compromisos de disciplina fiscal.
El Eurogrupo que se celebra mañana en Bruselas será la oportunidad para que De Guindos haga la tradicional presentación que los ministros que asumen un cargo -aunque en este caso, continúe en el mismo- comparten con el resto de colegas sobre las perspectivas y objetivos en términos económicos.
Fuentes cercanas al ministro confirmaron que éste aprovechará la discusión prevista entre los diecinueve sobre los primeros resultados de la sexta misión de supervisión tras el fin del programa de asistencia financiera a España para hacer su exposición.
Esta misión concluyó de manera preliminar que el crecimiento de la economía española es "robusto", pero también avisó que el nuevo Gobierno tendrá que continuar implementando reformas estructurales para mantenerlo, así como que debe completar la reestructuración y privatización de Bankia (MC:BKIA) y BMN.
Una de las primeras cuestiones que De Guindos tendrá que abordar tras asumir su puesto es la confección y el envío a Bruselas de un presupuesto completo para el próximo año, que incluya nuevas medidas para cumplir con el compromiso de reducir el déficit público al 3,1 %, en lugar del 3,6 % que preveía el Gobierno en sus presupuestos prolongados, es decir, si no se tomaban nuevas medidas.
Este medio punto porcentual de diferencia supone un ajuste de unos 5.500 millones de euros.
Bruselas quiere que España mande cuanto antes las nuevas cuentas, de modo que pueda evaluarlas si es posible junto al resto de presupuestos nacionales y pronunciarse al respecto a mediados de mes, tras lo que se espera que los ministros analicen su veredicto en el Eurogrupo del 5 de diciembre.
La situación presupuestaria está también en la agenda del encuentro de mañana, pero solo como un punto de información en el que la Comisión Europea explicará a los ministros cómo avanza el proceso.
El Eurogrupo también abordará los resultados de la primera visita a Chipre tras el fin de su rescate, aunque como suele ser habitual en la eurozona, Grecia acaparará más tiempo de los ministros.
No obstante, no se espera que los diecinueve mantengan una discusión en profundidad sobre esta cuestión, sino más bien que se les informe sobre cómo ha arrancado la segunda revisión del cumplimiento de las condiciones asociadas al tercer rescate griego, que incluye temas delicados como la reforma de las pensiones.
"Se va a ver qué se ha hecho, es solo el principio, no creo que haya debate", recalcaron fuentes diplomáticas, mientras que unas segundas fuentes comunitarias aseguraron que "no habrá mucho sobre lo que informar".
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