Lisboa, 21 jul (EFE).- Las tasas de interés que penalizan la deuda soberana de Portugal muestran una clara evolución a la baja como consecuencia del ambiente de relativa calma que se vive en los mercados tras semanas de incertidumbre por la situación de Grecia.
En apenas quince días, los títulos lusos a diez años -utilizados como referencia- pasaron de superar el 3,1 % a cotizar en el entorno del 2,5 %, como lo hacían hoy.
Aún así, la rentabilidad exigida por los inversores en el mercado secundario -donde se compran y venden bonos adquiridos en subasta pública- continúa lejos del mínimo histórico alcanzado el pasado marzo, cuando esta deuda se llegó a intercambiar al 1,5 % de interés.
Las obligaciones portuguesas a dos años cotizaban hoy al 0,36 %, la mitad que hace apenas dos semanas, y a cinco años lo hacían al 1,33 %, 4 décimas menos que el pasado 6 de julio.
Portugal es considerado uno de los países más sensibles a una hipotética salida de Atenas del euro, según la mayoría de analistas, pese a que cerró con éxito su rescate financiero en mayo de 2014.
La posibilidad de que Grecia deje la moneda única fue alejada recientemente por la canciller alemana, Angela Merkel, quien valoró el principio de acuerdo alcanzado hace poco más de una semana entre los países de la zona del euro para otorgar un tercer rescate al país mediterráneo a cambio del compromiso de aplicar más ajustes y reformas por parte del Gobierno liderado por Alexis Tsipras.
La mejora de la confianza entre los inversores llevó al Tesoro luso a anunciar para mañana una emisión de obligaciones que incluirá una línea con títulos a 22 años, el vencimiento más largo lanzado desde 2009.