Lisboa, 11 jul (.).- El Gobierno de Portugal pidió hoy "una aplicación inteligente" de los tratados europeos que tenga en cuenta el duro contexto europeo en que se vive para que no se sancione al país por haber incumplido el déficit entre el 2013 y el 2015.
Pedimos "una aplicación inteligente que tenga en cuenta el contexto en el que vivimos", dijo a las televisiones lusas el ministro de Finanzas de Portugal, Mário Centeno, desde Bruselas.
Centeno realizó estas declaraciones después de que los ministros de Economía y Finanzas de la zona del euro mostrasen hoy su consenso sobre que España y Portugal no llegaron a tomar las medidas necesarias para reducir su déficit, como se habían comprometido, por lo que han decidido respaldar mañana que se imponga una multa a ambos países.
En 2015, Portugal cerró con un déficit del 4,4 %, -incluyendo el impacto fiscal derivado de la liquidación del banco Banif-, lejos de lo pactado con Bruselas, que exigía que el indicador no alcanzase el 3 %.
"Una victoria para el Gobierno es que se entiendan nuestras razones. Una sanción cero garantizaría que no hay impacto presupuestario en nuestras cuentas", explicó Centeno, quien adelantó que presentará las alegaciones en breve.
El presidente del Eurogrupo, el holandés Jeroen Dijsselbloem, anunció hoy que los miembros de la Eurozona votarán mañana a favor de respaldar las recomendaciones de la Comisión Europea.
Esto supone que, salvo sorpresa, mañana los socios de la eurozona respaldarán en el consejo de ministros de Economía y Finanzas de la UE la conclusión a la que llegó la Comisión Europea (CE) de que ni España ni Portugal tomaron "acciones decisivas" para cumplir con los compromisos que habían asumido con sus socios.
Ambos países no podrán participar mañana en la decisión, al ser los afectados por el veredicto, cuya aprobación abrirá un plazo de 10 días a los dos gobiernos para presentar sus alegaciones a fin de evitar una multa.
La aprobación formal de mañana también da a la CE 20 días para entregar al Consejo una recomendación para una sanción y la suspensión de parte de los fondos estructurales y de inversión europeos.