Buenos Aires, 28 may (EFE).- El presidente argentino, Mauricio Macri, expresó hoy su deseo de que el Congreso argentino sancione el proyecto de ley de blanqueo de capitales anunciado ayer que, a su juicio, generará un sistema de jubilación "justo" y evitará que las personas mayores vuelvan a quedar en "estado de abandono".
"Es muy bueno que como sociedad nos enfoquemos en resolver este tema después de tantos años de abandono", dijo el mandatario durante un acto en un centro de jubilados de la localidad bonaerense de Boulogne en referencia al Programa Nacional de Reparación Histórica para Jubilados y Pensionados.
Macri anunció ayer que el proyecto de ley de blanqueo de capitales que forma parte del programa, que debe ser aprobado por el Congreso argentino, servirá para financiar el pago a jubilados que en los últimos años llevaron a juicio al Estado por reajuste en función del coste de vida y para implantar una pensión universal, de forma que se beneficie a unas 2,5 millones de personas mayores.
Según un comunicado de la Presidencia argentina, el jefe del Ejecutivo aseguró hoy que la iniciativa que el Gobierno envió al Congreso abre el camino para crear un sistema de jubilación "justo, equitativo y sustentable en el tiempo" y evitar que quienes han dedicado "una vida de amor y de trabajo" al país no vuelvan a quedar "en estado de abandono".
En ese sentido, insistió en que espera que el resto de fuerzas políticas lo acompañen para saldar una "deuda histórica" y "dar vuelta la página".
"Una sociedad que no se ocupa de sus abuelos es una sociedad que tiene una falla muy grande", apuntó Macri antes de aseverar que "aquellos que se tengan que jubilar a partir de mañana podrán cobrar desde el primer día el haber que les corresponde".
Para acceder al blanqueo, el Gobierno argentino plantea tres opciones: pagar un impuesto especial, suscribir bonos por el monto declarado o hacer inversiones de largo plazo en el país.
Aquellas personas físicas o jurídicas que declaren menos de 305.000 pesos (unos 21.500 dólares) no pagarán nada en concepto de gravamen y hasta 800.000 pesos (unos 56.000 dólares) el impuesto será del 5 %, mientras que por encima de esa cantidad, la tasa a pagar será del 10 % hasta el próximo 1 de enero, fecha en la que la alícuota subirá al 15 %.
"Invitamos a aquellos que más tienen a regularizar su situación" en materia impositiva, insistió Macri, "para que arranquemos todos juntos esta nueva etapa poniendo el hombro".
Los fondos obtenidos se destinarán a la corrección de las jubilaciones que en las últimas décadas no se liquidaron bien y a instaurar una pensión universal, percibible por cualquier argentino a partir de 65 años incluso si no ha cotizado los años suficientes.
La corrección se refiere a la necesidad de reajustar las pensiones en función del coste de vida, establecida por ley, que no se aplicó como correspondía en las últimas décadas según el Poder Judicial.
Por su parte, la pensión universal alcanzará el 80 % del monto de la jubilación mínima establecida por ley.