La ministra de Finanzas británica, Rachel Reeves, ha anunciado planes para implementar "mecanismos de control" que regularán el endeudamiento adicional destinado a inversiones en su próximo presupuesto. En una entrevista publicada el viernes, Reeves subrayó la necesidad de realizar inversiones prudentes y sensatas a largo plazo, así como la importancia de contar con medidas para prevenir un endeudamiento excesivo.
El presupuesto, que Reeves presentará el 30.10.2023, marca un hito significativo para el gobierno laborista liderado por el primer ministro Keir Starmer. La nueva administración se ha comprometido a impulsar la inversión en infraestructura y la transición hacia una economía de cero emisiones netas para acelerar el crecimiento económico del Reino Unido.
Con la deuda pública del país rondando el 100% de su producción económica anual, los inversores están observando atentamente cuánto más se endeudará el gobierno, junto con algunos aumentos de impuestos previstos. El reciente incremento en los rendimientos de los bonos del gobierno británico (gilts), superando a los de otros bonos gubernamentales, refleja la preocupación de los inversores sobre posibles ventas adicionales de deuda. Esta incertidumbre financiera también ha mermado la confianza de los consumidores, planteando desafíos para el gobierno laborista en sus primeras etapas.
Reeves y Starmer actúan con cautela para no repetir la agitación del mercado experimentada en 2022 bajo el mandato de la ex primera ministra Liz Truss, cuyos planes de recortes fiscales sustanciales sin financiación provocaron su dimisión. Para garantizar la transparencia y la rendición de cuentas, Reeves ha anunciado que la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria y la Oficina Nacional de Auditoría revisarán sus planes de inversión pública, que también tienen como objetivo estimular la inversión privada.
El gobierno planea considerar los beneficios a largo plazo de una mayor inversión pública más allá del horizonte de pronóstico estándar de cinco años de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria. Reeves, quien anteriormente trabajó como economista para el Banco de Inglaterra, tiene la intención de actualizar la regla fiscal de deuda del gobierno para reflejar los impactos positivos de la inversión en lugar de centrarse únicamente en los costos. Sin embargo, no especificó el alcance del gasto adicional que esta revisión permitiría.
Reeves también destacó la necesidad de impuestos más altos para evitar recortes en las ya tensas finanzas públicas, que estaban implícitas en las políticas del anterior gobierno conservador. Aseguró que el próximo presupuesto no supondrá un retorno a las medidas de austeridad y afirmó que el objetivo es proporcionar una evaluación transparente de las presiones fiscales y la tributación. El presupuesto tiene como meta corregir las tergiversaciones de la administración anterior y restaurar la honestidad en las finanzas públicas, según Reeves.
Reuters contribuyó a este artículo.
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