MADRID (Reuters) - El ministro español de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, se encontrará el viernes con el rechazo generalizado de las Comunidades Autónomas (CCAA) a realizar más recortes cuando se reúna esta tarde con sus homólogos regionales para abordar el desvío del déficit 2015 y las exigencias de Bruselas para recortarlo.
Montoro ha convocado a los consejeros autonómicos a una hora tardía, a partir de las 18:00 horas, a un encuentro con ocho puntos del orden del día, que se prevé tenso y en el que el ministro en funciones hará una defensa cerrada de la estabilidad presupuestaria ante la "rebeldía" de la mayoría de las regiones, entre ellas alguna del Partido Popular.
España cerró el año pasado con un desfase presupuestario del 5 por ciento del PIB, frente al 4,2 por ciento comprometido con la Comisión Europea, -con la que quiere negociar una senda de consolidación fiscal más suave- y culpa fundamentalmente del desvío a las CCAA.
Sólo tres de las 17 comunidades - Canarias, País Vasco y Galicia - cumplieron su objetivo de déficit el año pasado, y de las 14 restantes, seis incluso lo aumentaron con respecto a 2014. En conjunto, cerraron con un desfase de un 1,66 por ciento del PIB frente al 0,7 por ciento pactado.
La postura generalizada de las regiones es que el Ejecutivo debe realizar un nuevo reparto interno del déficit entre las administraciones para que el Estado reduzca más su brecha presupuestaria y no haga recaer en las CCAA, -que soportan el gasto de la educación y la sanidad- el principal ajuste.
"No puede ser que el Estado no se apriete en absoluto el cinturón y todo el recorte al que obliga Europa recaiga sobre las comunidades", dijo el presidente de Aragón, el socialista Javier Lambán.
FRENTE MÁS HOSTIL
Tras una legislatura en la que el Partido Popular no sólo gobernaba con mayoría absoluta en el Congreso sino que también estaba en el Ejecutivo de la mayoría de las CCAA, las últimas elecciones autonómicas dieron la vuelta a esta situación, por lo que Montoro se topará con un frente mucho más hostil que en pasados Consejos de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
El ministerio, que en todos estos años no ha adoptado las medidas correctoras con las que amenaza ahora, insiste en que las regiones no tienen que hacer más recortes, sino simplemente no aumentar su gasto y dedicar los recursos que recibirán de más este año por el sistema de financiación y el ahorro de intereses -unos 10.000 millones de euros según el Ejecutivo- a reducir el déficit.
"No estamos pidiendo reducciones de gasto a nadie, sino que estamos diciendo que los nuevos recursos se utilicen en financiar el gasto que ya tienen y que ha causado el déficit público", dijo Montoro en el Congreso la semana pasada.
"Parece que (los nuevos Gobiernos) han llegado para gastar más, cuando para lo que han llegado es para gastar mejor en un país que tiene que seguir reduciendo su déficit público (...) no tienen margen para gastar más", añadió.
Las autonomías se quejan del "maltrato", "soberbia" e incluso "discriminación" del ministerio hacia las CCAA, que abordarán también su reivindicación permanente de reformar el sistema del financiación autonómico.
Después de no abordar durante esta legislatura la revisión del sistema, Montoro ha incluido entre los puntos del orden del día de la reunión informar sobre la creación de una comisión de expertos dedicados a esta complicada tarea.
Además, para tratar de incentivar el cumplimiento de los objetivos, el ministro en funciones podría anunciar medidas para que las comunidades cumplidoras tengan una "discriminación positiva" y un reconocimiento que se traduzca en una mejor financiación.