Lisboa, 14 jul (EFE).- El primer ministro luso, Pedro Passos Coelho, apeló a un segundo mandato de la coalición conservadora que gobierna en Portugal para garantizar la estabilidad política que el país necesita en los próximos cuatro años.
En una entrevista con la cadena portuguesa SIC a falta de dos meses de las elecciones legislativas, aseguró que "no hay ninguna división" en la coalición entre su partido, el socialdemócrata (PSD), y los democristianos del CDS.
Passos Coelho resaltó la mejora lograda por la coalición que encabeza en los sondeos, que actualmente se sitúa a apenas dos puntos porcentuales de los socialistas, favoritos en las encuestas.
"Hace un año nadie diría que los partidos de la coalición podrían tener la perspectiva de ganar las elecciones", señaló.
Asumió que los portugueses le identifiquen como el rostro de la austeridad, pero aclaró que también es "el rostro de la recuperación".
El jefe del Gobierno luso defendió el trabajo realizado por su Gobierno en los últimos cuatro años, en los que tuvo que afrontar la aplicación del memorando pactado con la troika en 2011 a cambio del programa de asistencia financiera, un plan de recortes y reformas que en ese momento era "incumplible".
"Las cuentas (del memorando) estaban mal hechas y no fui yo quien las hizo", dijo, y consideró que si no hubiera ido "más allá" de ese programa, Portugal estaría ahora como Grecia.
El primer ministro también hizo referencia a la estrategia que defiende la coalición de cara a la próxima legislatura, en la que pretenden ir eliminando, de forma gradual, los recortes y medidas de austeridad aplicadas en los últimos años, un compromiso recogido en el programa de estabilidad.
Entre esas medidas mencionó la supresión de la sobretasa extraordinaria del 3,5 % que pagan los trabajadores lusos, la eliminación de los recortes aplicados a los salarios de los funcionarios y la reducción del IRC (impuesto de sociedades) para todas las empresas.
El jefe del Gobierno luso explicó que busca una recuperación de la economía "liderada por las exportaciones" y por la creación de empleo a través del fomento de nuevas inversiones en Portugal.
Aunque reconoció que el desempleo aumentó más de lo previsto al inicio de la legislatura, defendió el trabajo realizado por su Gobierno para combatir este problema, destacando que entre enero de 2013 y abril de 2015 se crearon 175.000 puestos de trabajo.
Rechazó además que se haya producido una precarización del trabajo, señalando que por cada trabajador con un contrato temporal existen tres que tienen un contrato indefinido.