Madrid, 20 nov (.).- A 24 horas de la votación del paquete fiscal del Gobierno en el pleno del Congreso, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, negocia con el Gobierno la abstención de sus cuatro diputados a cambio de "garantías" de que saldrá adelante el decreto-ley que prorrogaría el gravamen a las energéticas en 2025.
Belarra, que mantiene contactos con los ministros de Presidencia, Félix Bolaños, y Hacienda, María Jesús Montero, quiere que el Ejecutivo le garantice que tiene los votos del PNV y Junts para convalidar ese decreto-ley, han confirmado fuentes de su entorno.
ERC, EH Bildu y BNG apoyarán este jueves la ley que establece un impuesto mínimo del 15 % a las multinacionales y otras medidas fiscales después de pactar con el Ejecutivo, el pasado lunes por la noche, que la prórroga del gravamen a las energéticas quedará fuera de este paquete y se aprobará vía decreto-ley antes del 31 de diciembre.
Belarra no quiso sumarse a ese acuerdo la noche del lunes porque intuyó que ese decreto-ley era una "tomadura de pelo" y que nunca se aprobaría en el Congreso, ya que para ello son necesarios los votos de Junts, que a su vez tiene un acuerdo con el Gobierno para que no haya impuesto a las energéticas.
"A nosotros no nos vale con retratar a Junts y al PNV, sino que queremos el impuesto", insisten desde Podemos.
Entretanto, fuentes de Junts se remiten al acuerdo que tienen con el Gobierno para "no gravar a las empresas energéticas que mantengan su compromiso efectivo de inversión para la descarbonización".
A 24 horas de la votación, con la que España se juega más de 8.000 millones de euros de ingresos, desde el Ministerio de Hacienda buscan la fórmula para conseguir la abstención de Podemos.
Se trataría de diseñar un impuesto a las energéticas con "incentivos" a la descarbonización, según fuentes de Hacienda, aunque en Junts reiteran que ellos han pactado que "no habrá impuesto, ni gravamen ni nada parecido".