Nueva York, 20 ene (EFE).- La próxima reunión entre Argentina y los fondos especulativos para tratar de cerrar el litigio que mantienen en Nueva York se aplazó y se celebrará finalmente los próximos días 1 y 2 de febrero, informó hoy el mediador designado por el juez Thomas Griesa.
En un principio, se esperaba que el encuentro tuviese lugar la próxima semana, una opción que se ha abandonado por "dificultades logísticas", explicó el mediador, Daniel Pollack.
"He estado en contacto con el secretario de Finanzas de la República Argentina y con los responsables de los principales tenedores de bonos durante los últimos dos días y ahora anticipo que las negociaciones se retomarán en mis oficinas de Nueva York el 1 y 2 de febrero", dijo Pollack en un breve comunicado.
El Ejecutivo argentino ya había informado hoy que los fondos le habían pedido postergar la presentación de una propuesta para solucionar el conflicto hasta la primera semana de febrero.
Según el Ministerio de Hacienda y Finanzas, el pedido fue transmitido, a través de una llamada telefónica, por Pollack al secretario de Finanzas argentino, Luis Caputo.
El funcionario contó que Pollack le "transmitió la solicitud" de los tenedores de bonos impagados de "por problemas de logística, posponer la presentación de la propuesta argentina para la primera semana de febrero".
Las dos partes mantuvieron el pasado miércoles una primera reunión facilitada por Pollack, en la que la administración de Mauricio Macri se comprometió a presentar ese plan, en principio, el 25 de enero.
Argentina tiene intención de incluir en esa propuesta a los llamados "me too", los bonistas que quieren hacer extensivo el fallo favorable conseguido por los "fondos buitre" por unos 1.300 millones de dólares más intereses.
Así lo anunció tras el primer encuentro el secretario de Finanzas del país, Luis Caputo, quien lidera las negociaciones por parte argentina.
Según dijo la pasada semana el Gobierno, el total de la deuda enmarcada en el juicio era inicialmente de 2.943 millones de dólares pertenecientes al cese de pagos argentino de 2001, pero al aplicarse los últimos fallos de Griesa ha pasado a ser 9.882 millones de dólares.
Un fallo del juez neoyorquino Griesa a favor de los fondos que no aceptaron las reestructuraciones de deuda de 2005 y 2010 mantiene congelados los pagos de Argentina a los acreedores con deuda reestructurada, a la espera de que el país regularice su litigio con los fondos especulativos.
Esta situación llevó al país a ingresar en una "suspensión de pagos selectiva", que actualmente es la principal traba para que Argentina acceda a los mercados crediticios internacionales.